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Juan R. Hernández
Sin duda, el nerviosismo y una que otra cara desencajada se puede observar en algunos equipos de trabajo de una que otra Corcholata presidencial (omito mencionar nombres) que ya no se ven tan confiados de salir adelante en la verdadera encuesta del mes de septiembre.
Tal y como lo señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador, al calor del proceso interno de Morena, hubo grupos que evidentemente intentaron provocar que alguna de las Corcholatas tuviera una caída estrepitosa, sobre todo a quien encabezaba las preferencias.
Sin embargo, aunque hubo unos golpes acertados, la mayoría de ellos ya se esperaban por “obvias razones” y se pudo hacer un control de daños.
Las asambleas concluyeron y ahora solo resta que los 12,500 mexicanos que fueron elegidos para participar en esta encuesta trascendental, emitan su veredicto a favor de quien los representará rumbo al 2024. En tanto, el presidente López Obrador, el próximo el 6 de septiembre, anunció que, en una ceremonia simbólica, entregará fuera de Palacio Nacional, el “Bastón de Mando” a la mujer u hombre que encabezará los Comités de Defensa de la 4 T. De ahí en adelante, comenzará la operación cicatriz en aquellas entidades que se lastimaron a militantes y (les gusté o no) los equipos.
En donde se vislumbra que habrá tormenta, es en la CDMX, en donde todo parece indicar que las candidatas mujeres, por aquello de la cuestión de Igualdad de Género y del acuerdo alcanzado en el FAM, pues ya no podrían competir para la jefatura.
Esta situación ha ocasionado gran molestia porque al ser señalado el alcalde de BJ, Santiago Taboada, como el otro palomeado por los grupos del poder, es muy probable que el ala femenina no se quede de brazos cruzados.
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