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Juan Hernández
Es curiosa la forma en que una postura en un mismo grupo parlamentario puede cambiar, y ejemplo de ello es el PAN en el Congreso de la Ciudad de México (en donde obviamente se puede ver la diversidad de opiniones), que hay quienes quieren trabajar con el nuevo Jefe de Gobierno y quienes definitivamente, la tónica es la de negatividad.
Mientras el diputado Ricardo Rubio ya adelanta que se “mantendrán las políticas dictatoriales” y hasta menciona a Marcelo Ebrard, quien “despidió a Batres, al descubrir el lucro que estaba haciendo con los uniformes de las niñas y niños capitalinos”, también está el otro extremo con el panista Luis Chávez García, quien se comprometió con el Gobierno Central a construir los instrumentos legislativos necesarios para incrementar las penas de cárcel a la tala clandestina.
Incluso, el diputado blanquiazul solicitó al gobierno de Martí Batres, ser parte de las mesas de trabajo que realiza con habitantes de San Miguel Topilejo, con la finalidad de coadyuvar en el procesamiento de las legislaciones correspondientes para inhibir el flagelo de la tala clandestina.
“Nosotros tenemos una representación popular en Tlalpan y este es un tema que nos ocupa también como Legislativo, por eso nos interesa que el Gobierno nos involucre”, expresó.
Definitivamente son dos visiones. Una que quiere trabajar y tender puentes, otra que, de antemano ya dinamitó los puentes.
Y es curiosa la forma en que se “chamaquearon” a la diputada con licencia, Yeidckol Polevnsky, quien ha ocupado los cargos de Secretaria General de Morena (2015-2020) y Presidenta Nacional de Morena (2017-2020).
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