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abril 28, 2024

Seguridad

Meseros y chicas habrían envenenado con gotas a Íñigo Arenas Saiz

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Redacción, Grupo Cantón

La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) investiga por homicidio la muerte del empresario Íñigo Arenas Saiz, quien habría ingerido drogas en su bebida, la cual habría sido suministrada por los 6 trabajadores detenidos, identificados como: Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N”, Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”.

Las investigaciones concluyen que la causa de la muerte del empresario de 41 años dentro del Black Royce fue por asfixia mecánica por sofocación inducida en su modalidad de oclusión de vías respiratorias por contenido gástrico, con presencia de alcohol y sustancias químicas de naturaleza controlada.

Es decir que de manera deliberada Íñigo fue intoxicado con gotas en su bebida, lo cual a su vez combinado con el alcohol terminó por matarlo. Hasta el momento la fiscalía estatal no ha detenido a ninguno del o los dueños del lugar.

Un dato revelador de la FGJEM fue que el teléfono celular de la víctima fue apagado a las 00;05:09 horas del domingo 6 de agosto en la zona de la alcaldía Miguel Hidalgo, es decir cuando se encontraba en Polanco y este equipo fue encendido nuevamente a las 06:41:25 horas del mismo día, pero en el área de Santa Martha Acatitla, en Iztapalapa.

La Policía de Investigación continúa con las indagatorias sobre la actividad de su equipo móvil con el fin de establecer su ubicación actual. Tras haber salido del Bar Republic en Polanco, Íñigo abordó un taxi cromatizado de la Ciudad de México con matrícula A 5915 M, en el cual arribó al Black Royce, en el municipio de Naucalpan.

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A las 4 de la mañana el empresario se instaló en la planta baja donde permaneció acompañado por las damas Aritzi Abril, Ana Karen, Cecilia, y una segunda Ana Karen, quienes aparentemente fueron las que le suministraron sustancias a la víctima. Luego de una hora fue invitado por Eduardo N, otro de los empleados del lugar para que subiera a la planta alta en la zona denominada como VIP.

Siete minutos más tarde es decir a las 5:07 una mesera subió para cobrar una cuenta que ascendía a 40 mil pesos ya que las mujeres y el mesero le ensartaron 4 botellas de 10 mil pesos cada una.

A las 5:47 una de las mujeres que estaba en compañía de Íñigo alert´ño al guardia de seguridad Carlos “N” que Íñigo se sentía mal y estaba morado, por lo cual varios meseros trataron de reanimarlo con RCP.

A las 6 de la mañana el empresario continuó sintiéndose mal por lo que los empleados lo trasladaron a otra área del bar cerca de una salida de emergencia, donde finalmente falleció y fue levantado el cuerpo por parte de las autoridades capitalinas.

 

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