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Los propietarios de una tienda comercial en Estados Unidos denunciaron que una de sus empleadas comió muchas rebanadas al día durante ocho años
Recientemente se dio a conocer que en la localidad de Bolivar ubicada en Ohio, una empleada de una tienda de comestibles fue acusada de robo.
Y no, no sustrajo el dinero de la caja registradora, ni hurtó una cartera, su pecado fue comer jamón.
En serio, no estamos bromeando. Los propietarios la denunciaron luego que se enteraran que comió al día varias rodajas durante ocho años.
De acuerdo con Associated Press, los dueños, pertenecientes a la cadena Giant Eagle, aseguraron que el valor total del jamón consumido asciende a 9 mil 200 dólares.
El informe del caso fue entregado al fiscal por la oficina del sheriff, que no realizó ninguna detención, según Fox News.
Aunque el departamento policial declaró que no tenía autoridad para tomar la decisión final, se manifestó “completamente seguro” de que es “poco probable” que los cargos delictivos se formalicen una vez que los hechos sean aclarados por la Fiscalía.