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Agraviados señalan que las elecciones han sido todo un fraude y que las quejas y denuncias ante las autoridades laborales no han servido de nada
Javier Cerón Espinosa
Ciudad de México.- – La ilegalidad y las corruptelas se imponen en las elecciones del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), como el sello particular impuesto por su sempiterno dirigente Carlos Romero Deschamps, bloqueando el registro de planillas para contender contra las oficiales como en el Hospital Regional Norte de Azcapotzalco, donde impera el hostigamiento laboral y el contubernio del comité electoral para favorecer a Andrés de la Rosa Hernández, de la planilla blanca.
Esto lo denunciaron trabadores de ese hospital, al señalar que las elecciones han sido todo un fraude y lo peor es que se ha observado que las quejas y denuncias ante las autoridades laborales no han tenido respuesta, es un hermetismo que provoca la indignación de los trabajadores petroleros, porque la Reforma Laboral se está distorsionando al modo de los “caciques”.
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Igual en la sección 50, de acuerdo con fuentes sindicales acreditadas, , prevalece toda una red de corruptelas solapadas por José del Carmen de la Cruz, que van desde despidos injustificados, congelamiento de plazas y represión laboral, así como manejo de “negocios” que llenan sus bolsillos por la renta de camiones propiedad de la sección a particulares que les permite ganancias extraordinarias calculadas por los trabajadores en unos 5 millones de pesos, que no se rinden cuentas y prevalece la opacidad. Junto con las secciones, 10, 29 y 36, las dirigencias pertenecen a la estructura sindical corrupta impuesta por Deschamps y conforme avanza el proceso electoral, “…las autoridades están cada día más rebasadas.
