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Alejandro Armenta Mier
Es bien sabido que todos los niños tienen derechos a la salud, a la vida y a la educación, entre otros, que además de protegerlos, tienen el fin de brindarles la oportunidad de contar con mejores posibilidades en su vida.
Sin embargo, aún en estos tiempos, a pesar de estos derechos, existen todavía niños que son privados de ellos y en muchas ocasiones esta situación es derivada de las circunstancias o entorno en el que nacieron; exponiéndolos y orillándolos al trabajo infantil.
Por ello, el 12 de junio conmemoramos el Día Mundial contra el Trabajo Infantil por lo que insistimos en el fortalecimiento de la justicia social, es decir, si existen oportunidades de trabajo para los adultos, así como programas con soluciones para disminuir la pobreza, desigualdad social, podremos lograr erradicar el trabajo infantil.
Como legislador, he presentado diversas iniciativas en apoyo y protección a los derechos y bienestar de las niñas y niños; sin embargo, también es importante destacar que la recién constitucionalizada Ley 3 de 3, tiene un elemento importante que coady uva en este sentido, siendo que los padres y las madres no pueden desentenderse de las obligaciones que tienen para con sus hijos, esto por supuesto que ayudará en los casos de los menores que se ven obligados a trabajar por la falta de responsabilidad económica de sus progenitores.
