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El temor de una desaceleración económica debido a la tensión comercial entre los dos gigantes del mundo: China y Estados Unidos, causaron un debilitamiento en la demanda de petróleo, y con ello una fuerte caída en los precios internacionales, principalmente de la mezcla mexicana.
El petróleo mexicano perdió en una semana 3.33 dólares por barril, desde los 50.69 del 6 de agosto.
Pero la caída más estrepitosa se registra en los últimos 10 meses, al bajar de 77.73 dólares por barril el 3 de octubre del 2018, a los 47.36 del 9 de agosto de este año; es decir, cayó 29.69 dólares.
De esta manera, el hidrocarburo mexicano se aleja ocho dólares de la meta estimada del Gobierno Federal, que en sus Criterios Generales de Política Económica 2019 presupuestó el barril en 55 dólares.
ASEGURAN INGRESOS
De acuerdo con informes de Pemex, se cuenta con coberturas (pólizas de seguros) contratadas al precio presupuestado, por lo que de caer de este nivel al final del año el país tendrá asegurado sus ingresos.
Pero de acuerdo con analistas consultados por Grupo Cantón, las finanzas de Pemex se verán afectadas por esta baja de petroprecios, pues las ventas al exterior representan ingresos para el país por dos mil 023 millones de dólares diarios, de los cuales una parte de ellos son destinados para la manutención de la Empresa Productiva del Estado.
Agencias internacionales refieren que un descenso de las actividades comerciales entre las dos mayores potencias económicas del mundo, EU y China, lleva a los expertos a prever una ralentización mundial de la economía.
Es decir, la actividad económica será más lenta o se desarrollará con menor rapidez.
