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29/10/2019 06:23 / Centro, Tabasco
Las carnicerías de franquicia siguen ganando terreno en Tabasco, desplazando a las carnicerías tradicionales, con productos cárnicos provenientes de Veracruz, Chiapas y Campeche, ante la falta de rastros y procesadoras de carne en Tabasco.
Cadenas de carnicerías como SuKarne, Maxicarne, El Jarocho Carnicerías, Grijalva, Cafisu y Kekén, han generado un cambio en los hábitos de compra de carnes, pues ofrecen más facilidades que un mercado tradicional, además de que una sola de estas cadenas, como en el caso de Grijalva tienen en Tabasco más de 100 sucursales.
Las carnicerías de franquicia que en los últimos seis años han crecido hasta en un 100 por ciento, se han convertido en una dura competencia para las carnicerías tradicionales, pero también en un alivio para los marchantes, pues en estos sitios los productos cárnicos llegan a costar entre un 10 y 15% menos.
Desde el punto de vista de Oliver Falcón, presidente de la Unión Ganadera del Municipio de Centro, la carne de res de productores locales perdió su valor agregado desde hace casi ocho años que el Rastro Tipo Inspección Federal (TIF) y el Frigorífico y Empacadora de Tabasco, dejaron de operar, al grado de ser hoy sólo proveedores de materia prima con ganado en pie, que se va a otros estados y regresa como carne procesada a montos elevados que golpean al sector.
“Ahorita ya nosotros sólo somos proveedores de materia prima y toda la producción de becerros se está yendo en pie a otros estados y están regresando carne procesada a montos elevados, lo que golpea al sector e impacta en el precio finalmente al consumidor”, afirmó.
De su lado Rosario Cabrera, locatario del mercado Tabasco Avanza, el propietario de la carnicería Charo Light, señaló que “desde hace cinco años cuando cerraron los rastros y la empacadora de carnes del frigorífico, las ventas cayeron paulatinamente hasta en un 50 por ciento, por lo que de 12 carnicerías que había antes, ahorita sólo hay 6”, expresó.
OFRECEN VARIEDAD
En tanto, los carniceros de franquicia aseguran que para poder vender sus productos han pasado todos los filtros sanitarios que establece la Secretaría de Salud, pero además ofrecen una variedad de carnes procesadas y cortes que las carnicerías tradicionales no, entre ellas los bistecs y arracheras marinadas, así como los cortes Rib Eye, New York y Cowboy, sin mencionar que en el mismo sitio ofrecen también carnes frías y otros tipos de productos cárnicos como cerdo y pollo.