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Por Ricardo Sevilla
Contra todos los pronósticos de la derecha, ha sido un éxito la inscripción a las próximas elecciones del Poder Judicial.
Miles de abogados se registraron. Y para chasco de la oposición moral e ideológicamente derrotada, más de 18 mil aspirantes se registraron ante los Comités de Evaluación del Poder Ejecutivo y del Legislativo. ¡Que no ante el Comité de Evaluación del propio Poder Judicial! ¡Hasta de ellos mismos desconfían!
El pueblo, que es sensato, entiende que es necesario democratizar todo el sistema judicial. Pero la derecha zafia, arrogante e insensata se aferra a no comprender.
Lo cierto es que estamos ante un proceso histórico en donde, por primera vez, se elegirán, mediante voto universal, libre, secreto y directo, a los integrantes del PoderJudicial.
Y hay que informar, con datos duros, qué significa todo esto.
Y significa que serán elegidos cinco ministras y cuatro ministros de la SCJN; tres magistradas y dos magistrados del Tribunal de Disciplina Judicial (TDJ); una magistrada y un magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), así como magistradas y magistrados de Salas Regionales, circuito y jueces de distrito.
Lo que hace rechinar los dientes de la oposición es que la instrumentación de lo que fue la Reforma al Poder Judicial, y que ahora es texto constitucional, es que terminará con el nepotismo y corrupción que se ha gangrenado ese poder.
Y vaya que hay personajes oportunistas, incongruentes y mentirosos.
Y es que hubo muchos personajes que criticaron durísimo la Reforma al Poder Judicial; gente que fue porrista de Norma Piña (que prefirió renunciar) y que, al final, terminó registrándose como candidato para ser juzgador.
Así de hipócrita e incoherente la oposición. Siempre han sido unos falsos e incongruentes!