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Juan R. Hernández
Se les “queman las habas” a los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), para comenzar a hacer sus desmanes y con ello presionar al gobierno federal y capitalino a fin de no perder sus “beneficios” por ¿enseñar?.
Primero, presentando una “encuesta nacional” de dudosa metodología y alcances (seguramente los habrían reprobado en la materia de Estadística) y ayer, de un secuestro técnico del presidente Andrés Manuel López Obrador cuando éste se dirigía hacia su conferencia de prensa matutina en Chiapas.
El acto de provocación de la CNTE no les funcionó… simplemente porque ya no son esos tiempos de los garrotazos que ellos añoran que regresen.
Aún así, anunciaron que en escuelas de la Ciudad de México, no regresarían a clases. Sin embargo, para su mala fortuna, el mensaje de la 4T es muy claro: NO SE DEJARÁN LLEVAR
POR CHANTAJES NI AMENAZAS.
Y lo mismo va para los otros grupos políticos, que lo que menos les interesa es la salud de los niños y niñas de México.
Si quieren reflectores, que sea trabajando a favor de la educación y no por mantener sus privilegios adquiridos en la época neoliberal.
