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Fabián Pasos
EL EMPODERAMIENTO LEGÍTIMO DE LA MUJER SIGUE TOMANDO FORMA
Hace días detuvieron al excandidato a senaduría de Movimiento Ciudadano, Elías Medel; aquel individuo torcido que subió a sus redes sociales imágenes con su hija en situaciones comprometedoras donde nunca se expresó de ella como su hija sino como una mujer a quién él consideraba, su pareja. El actor Eleazar Gómez recuperó su libertad condicional después de pagar una suma considerable de dinero para que la ofendida se sintiera respaldada por la “justicia” y hoy viva, según ella tranquila; después de haber llevado tras las rejas al actor.
Felix Salgado Macedonio está a nada de perder la posibilidad de contender por la gubernatura del estado de Guerrero después de también haber sido denunciado por “abuso sexual”.
El periodista Andrés Roemer sigue desaparecido de la vida pública después de ser denunciado por más de 61 personas quienes aseguran las violentó en su domicilio y abusó de la confianza de muchas de ellas perpetrando delitos al interior de su casa.
Actores y locutores como el “Turri” Macías fue denunciado por una actriz quien asegura sufrió de abuso sexual a los 17 años por parte del locutor de radio, aseguran hay más chicas que se han visto vulnerables por él y sus amigos. Ricardo González “Rix” influencer y youtuber está preso en el reclusorio oriente esperando que su proceso legal se apegue a derecho después de ser denunciado por Nath Campos quién después de cinco años aseguró que Ricardo abusó de ella aprovechándose del grado de alcohol que tenía en la sangre. La actriz Danny Berriel de Televisa subió un video a redes sociales donde expone el abuso sexual de Eduardo Ojeda y Gonzalo Peña quienes fueron cómplices del abuso sexual que cometieron en su contra en Acapulco, sin embargo Gonzalo Peña sigue prófugo de la justicia y Eduardo ya se encuentra detenido. Una columna completa para ex- poner los casos mediáticos que hoy están siendo la nota de diversos medios de comunicación donde el empoderamiento legítimo de la mujer sigue tomando forma en un país donde su sistema acusatorio penal es “paupérrimo” y no todo tipo de denuncia puede ser acreditada.