Sepultan a gigante de la caña

Explotado y nunca renovado fue el destino del Ingenio Azucarero “AZSUREMEX” que surgió como una alternativa agroindustrial para la vida de cientos de tenosiquenses y se formó con capital público para terminar en manos privadas, alimentada con migajas del gobierno; quejas y lamentos de sus dueños.

Lo anterior dijo Henry David Dominguez líder de la sección 22 quién agegó que sin la pasión por la industria ni el empoderamiento empresarial de sus dueños, el gigante azucarero de la región se arrodilló ante los duros golpes económicos de la competencia, los malos manejos y el desprecio por el mantenimiento de la fábrica.

A finales del 2018, cuando se pretendía levantar nuevamente al “Gigante” con la compra-venta, de cientos de hectáreas sucumbieron, primero, con la tardanza, luego, con la inexistente zafra.

Las razones por las que la fábrica se detuvo fueron conocidas por los productores, pues el Ingenio fue “vendido” por los hermanos Saenz a otros empresarios, a sabiendas de que el molino estaba hecho pedazos y se programaron la búsqueda de las piezas y un posible crédito a través del gobierno; sin embargo, nada se resolvió, perdiéndose una producción total de 130 mil toneladas en los campos de Tenosique y Balancán.

Las pérdidas que superaron los 124 millones de pesos ya eran “bola cantada” entre los empresarios, quienes enmudecieron y simplemente miraron la “Catástrofe” agrícola de la caña.

Algunos productores catalogan de “inaceptable” lo que ocurrió con el ingenio de Tenosique, ya que generaba y distribuía ingresos por 33 mmdp anuales.