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En su segunda semana de supervisión de centros de salud y hospitales en poblaciones rurales, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha encontrado el otro desastre que dejaron los gobiernos neoliberales que presidieron al país durante 36 años. Lo más difícil de resarcir: faltan 123 mil médicos en el país.
Y no se diga clínicas de salud, hospitales. Ante ello, ha dicho el primer mandatario, tres acciones fundamentales: abrir la matrícula para la carrera de medicina en las universidades, la creación del Instituto de Salud para el Bienestar, y continuar con la compra consolidada de medicamentos, sin corrupción, para garantizar el abasto.
En el caso de la falta de médicos, López Obrador ofreció cifras. “Hay 270 mil 600 médicos generales en el país y debemos de tener, de acuerdo a la norma internacional, 396 mil 600”.
De ahí, pasó al problema de fondo, con el ejemplo de lo ocurrido el último año. “De 13 mil 711 aspirantes a la carrera en la UNAM, en el último examen de ingreso, sólo aceptaron a 211, lo que ¡equivale a 2%! Por eso el rezago”.
Eso fue el año anterior, pero López Obrador recordó que eso mismo ocurrió durante toda la etapa neoliberal, de 35 años. “Por eso nos faltan cerca de 200 mil médicos en el país; es uno de nuestros desafíos”, expresó.
Amén de abrir la matrícula en las universidades para la carrera de medicina, López Obrador explicó lo que harán con la creación del Instituto de Salud para el Bienestar, que será el sustituto de lo que se llamaba el Seguro Popular, del cual refirió “ni es seguro, ni es popular.
Esa instancia pretende cubrir cuatro acciones muy relevantes y necesarias, la principal y urgente, que no falten las medicamentos y materiales de curación. Para ello serán las compras consolidadas, que estarán a cargo de la Oficialía Mayor de Hacienda, Raquel Buenrostro, a quien le externó todo su apoyo ante las presiones de los proveedores.
“Tenemos un acuerdo de apoyar en todo, que aguante todas las presiones y amenazas porque son muchos los intereses creados, porque vamos a ahorrarnos cuando menos 20 por ciento este año (unos 200 mil millones), que se clavaban, para decirlo con todo claridad. Raquel Buenrostro es la encargada de ahorrar esos 200 mil millones. Tiene todo nuestro respaldo”, dijo el primer mandatario el fin de semana.
En el arranque, este Instituto de Salud para el Bienestar, tendrá un presupuesto inicial de 80 mil millones de pesos, que forman parte del Fondo de Protección contra gastos catastróficos que tiene el Gobierno Federal.
Esto consta en el memorándum que firmó el sábado anterior el presidente López Obrador, para impulsar reformas a la Ley de Salud, en el que se incluye un decálogo en el cual se faculta al nuevo Instituto de Salud para el Bienestar para atender a toda la población que no cuenta con seguridad social.
El instituto lo encabezará Juan Antonio Ferrer y “trabajará en coordinación con el IMSS y el ISSSTE para salvar la vida a todos los pacientes.
En los dos últimos fines de semana, López Obrador visitó hospitales del programa IMSS-Bienestar: siete en Chiapas, uno en Nayarit y siete en Michoacán.
