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CIUDAD DE MÉXICO.– Tras darse a conocer que el saqueo a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y a la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu) durante las gestiones de Rosario Robles, detectado por la Auditoría Superior de la Federación, no terminó en las 76 empresas presuntamente beneficiadas por contratos de servicios.
Y es que de mil 900 millones de pesos del erario asignados por esas secretarías, más de 700 millones fueron finalmente transferidos en efectivo, diputados y senadores exigieron al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, que el caso no quede impune y se investigue a Robles, por su actuación al ser titular de ambas secretarías.
El coordinador de la bancada de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, confió en que no “habrá borrón y cuenta nueva para Rosario Robles” y dijo que propondrá su comparecencia para explicar este caso “y otras cosas”.
De igual manera, condenó “el manto de protección” hacia la titular de estas dos dependencias durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Gustavo Madero, senador del PAN, fue otra de las voces que se sumó al reclamo exigiendo que se sancionen a los responsables del desvío millonario.
En la Cámara de Diputados, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Mario Delgado, y la diputada panista Laura Rojas, condenaron el hecho.
