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México.- La Mesa Interinstitucional de Casos de Violencia Feminicida en la Ciudad de México, creada el 1 de marzo de este año para resolver feminicidios cometidos durante el sexenio de Miguel Ángel Mancera, causó un efecto adverso que sufren el día de hoy los familiares, quienes denuncian criminalización por parte de las autoridades participantes de la Mesa.
Madres de Lesvy Berlín Osorio, Yang Kyung María Jun Borrego, Victoria Pamela Salasz, Delcia Nanci Mesa, Mayra Abigail Guerrero y Campira Lisandra Camorlinga, acusan a la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) del sabotaje que impide que los casos de sus hijas y el de otras víctimas de violencia sexual, , sean tratados “hasta llegar a la verdad de los hechos, el cual es el objetivo de la Mesa”.
“No se brinda la atención debida a los casos, pues no hay evidencia de que se realicen diligencias mínimas de investigación con perspectiva de género”, argumentaron. Además de que se trabaja a partir de actos “simulación” que ofrecen apoyo sicológico y recursos económicos a través del Centro de Apoyo Sociojurídico a Víctimas del Delitos Violento (ADEVI), reduciendo la actuación de la procuraduría a acciones asistenciales.
Hasta el momento se han realizado 2 de las 5 reuniones de la mesa; las mujeres admitieron que en la primera de ellas sintieron confianza en que el Gobierno de la Ciudad de México corregiría los errores de las investigaciones, sin embargo, aseguran que en el segundo encuentro fueron intimidadas, reprimidas y revictimizadas ya que ni siquiera se les llamó por sus nombres o el de sus hijas: “nos asignaron un número para nuestra identificación”, dijeron.
Al jefe de Gobierno José Ramón Amieva, exigieron asumir de manera urgente la presidencia de la Mesa tal y como ellas lo habían solicitado con anterioridad; también demandan establecer una metodología clara para el seguimiento y evaluación de los acuerdos de la mesa. Asimismo, hicieron un llamado a la jefa de gobierno electa Claudia Sheinbaum para que se reúna con las familias.