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Ciudad de México.– Una escuadra perdedora en las últimas temporadas, para ésta no cambiará mucho el panorama, pues la idea al interior de la dirigencia de los Cincinnati Bengals es reestructurar a la franquicia, y los magros resultados serán parte de la misma.
Y la sacudida comienza desde las entrañas, pues se decidió cortar de tajo la era Marvin Lewis, aunque a cambio apuestan por un entrenador bastante joven: Zac Taylor.
De hecho, la idea es darle frescura a la organización en los departamentos claves de la misma, con la intención firme de reeditar los años mozos del equipo.
Sin embargo, y aun con todo ese plan ambicioso para cambiar el panorama, los Bengalíes tristemente se perfilan para tener una campaña perdedora, que además los ubicará en el sótano de la Conferencia Americana en la División Norte.
Mientras, aludiendo a escenarios más grises y negativos, Cincinnati, tomando como base la plantilla con la que cuenta, igual podría rondar la zona de las escuadras que podrían terminar con el peor récord en toda la NFL.
Respecto a la decisión de nombrar a Taylor como el manejador de los hilos tácticos, sólo el tiempo pondrá las cosas en su lugar, pues todo apunta a esa tendencia de recurrir a sangre nueva con ideas revolucionarias.
De entrada, se habla que el nuevo head coach modificará el sistema ofensivo, situación que deberá dominar enseguida el jefe en los controles: Andy Dalton.
Otra de las malas noticias es la baja por lesión de A.J. Green, que podría afectar severamente el funcionamiento del ataque.
