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Esta mañana se registró un conato de incendio en la Biblioteca Central de la Universidad Nacional Autónoma de México. Ante este hecho, ni la misma Dirección General de Comunicación Social de la UNAM, informó algo al respecto.
Sin embargo, un trabajador de la biblioteca declaró a este medio que fueron unas “hojitas las que se quemaron”, por lo que acudieron elementos del Cuerpo de Bomberos de la UNAM a apagar el pequeño incendio, que provocó la interrupción del estudio de los usuarios por más de dos horas.
Al pedir información vía telefónica al Cuerpo de Bomberos, el mismo jefe de Departamento, Roberto Hernández Camarillo, se negó a ello. Después contactamos a la Biblioteca Central, donde sucedió lo mismo.
Dos personas cercanas a la Unidad Administrativa de la Dirección General de Bibliotecas de la máxima casa de estudios comentaron que fue un usuario –que no pertenece a la UNAM– quien ocasionó el incendio, según lo que lograron registrar las cámaras de seguridad, contradiciendo la versión del primer trabajador que coordinó la entrada de los usuarios y los demás trabajadores tras el conato.
“Estaba una bolsa de basura en la planta principal, no sabemos si lo haya hecho con alguna intención, se empezó a incendiar la bolsa y fue lo que ocasionó todo el conato de incendio, se pudo apagar la bolsa sin problema, se sacó afuera del edificio y lo único que se dispersó fue el humo, por lo que acudieron bomberos”, comentó una trabajadora de la DGB, quien agregó que no lograron detener al provocador, pues “nadie se percató”.
Al contactar vía telefónica a José Luis Rodriguez, titular de servicios generales de la DGB, restó importancia al hecho, quien además ha sido acusado de violencia sexual a trabajadoras de la Biblioteca Central, publicado por El Universal.
