Visitas
Después de dos sexenios, en 2019 el Presidente volverá a rendir su informe en presencia, ante el Congreso de la Unión.
Así lo anunció el Presidente Andrés Manuel López Obrador al rendir protesta este sábado en la Cámara de Diputados, y lo reiteró ante más de 100 mil personas en el Zócalo en su fiesta de asunción.
“Cada año aquí en el Zócalo voy a informarles, y voy a ir, personalmente, al Congreso a dialogar con todas las fuerzas políticas. Pero también aquí un informe cada año”. Ese mismo compromiso asumió ante diputados y senadores.
En la historia posrevolucionaria de México, se instituyó el 1 de septiembre en la Constitución como el día en que el Presidente está obligado a rendir su informe ante el Congreso de la Unión.
A lo largo de las décadas, se convirtió en “El Día del Presidente”, por que era como una fiesta. No había cuestionamientos al primer mandatario. Quién respondía el Informe siempre era del mismo partido, y sólo alababa al mandatario.
Esto cambió ya en 1997, cuando el presidente Ernesto Zedillo perdió la mayoría en la Cámara de Diputados y Porfirio Muñoz Ledo, como líder de la oposición, respondió dura y críticamente al mandatario, pero no pasó de ahí.
En 2006 “El Día del Presidente” llegó a su fin, luego del conflicto postelectoral, pues López Obrador y el PRD reclamaban fraude en los comicios presidenciales. El 1 de septiembre, Vicente Fox llegó a la Cámara de Diputados a leer su Sexto Informe, pero los legisladores de izquierda no le permitieron ingresar al salón de Plenos. Se tuvo que ir.
Desde entonces, ni Felipe Calderón ni Enrique Peña volvieron al Congreso a leer su Informe. Sólo lo enviaron por escrito con el titular de la Secretaría de Gobernación.
Lo que falta ver es cuál será el formato del Informe, si el de antes, que se trataba de “El Día del Presidente”, como se le llamaba al 1 de septiembre, o será distinto ya en la Cuarta Transformación.