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MÉRIDA, YUCATÁN.– En la Gran Plaza de Mérida, se escuchan vítores, aplausos y gritos: “¡Presidente!, ¡presidente!”… “¡Sí se pudo!, ¡sí se pudo!”.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, habla ante más de 5 mil personas. Les acaba de anunciar dos beneficios para los trabajadores de base y sindicalizados de todo el gobierno federal: nadie será despedido. Y por el contrario, quienes perciban hasta 20 mil pesos mensuales, recibirán aumentos salariales año por año, por encima de la inflación.
Se compromete a que lo plasmará en una reforma a la Constitución. Algunos ejemplos de trabajadores que entran en este rubro: policías, soldados, marinos, médicos, enfermeras.
Advierte que eliminará las oficinas de representación del Gobierno federal, como las delegaciones estatales, que para el caso de Yucatán, dice, hay más de 60. “Puro recomendado. Será una oficina para todo el gobierno; solo lo indispensable, y aquí en Yucatán estará a cargo de Guacho (Joaquín Díaz Mena)”.
Remata la idea: “Se acabó lo de los recomendados políticos que ganan sin trabajar. Vamos a ahorrar el presupuesto. Ya no más un gobierno mantenido y bueno para nada. Ya no va a ser así. No se va a ir todo en sueldos elevados y gastos de operación”.
Continúa en su discurso de austeridad gubernamental y vuelve a provocar aplausos y vítores de los presentes: se van a eliminar las pensiones millonarias de los expresidentes, así como el Estado Mayor Presidencial que los cuida, cuyos 8 mil elementos pasarán a formar parte de las Fuerzas Armadas.
“¿Quién me va a cuidar?”, pregunta a la gente. Y al unísono responden: “¡Nosotros!”. El mandatario electo sigue: “Tengo 20 ayudantes, 10 mujeres y 10 hombres. De 8 mil, ahora me van a cuidar 20, y ustedes”. La gente responde: “¡Síiii!”.
El tema de los ahorros sigue: que tampoco va a utilizar ninguna de las aeronaves ni helicópteros que actualmente usa el primer mandatario. “Todos se van a vender o a rentar”. Y por tercera ocasión en los últimos dos días, menciona a la misma aerolínea de bajo costo. “Ayer, llegué a Cancún, volamos en Viva Aerobús. Y llegamos a buen tiempo. No voy a usar el avión presidencial. No voy a ofender al pueblo de México”.
Y cual si hubiera pegado de jonrón, el presidente electo le responde a esos que llama “radicales de izquierda”, que no confían en que va a revertir la mal llamada reforma educativa de Enrique Peña. “Se va a abrogar, abolir, eliminar, o como se le quiera llamar. ¡Se va, se va, se va, se fue! ¡Díganme que no a esa pelota!”
Día de reunión con el flamante gobernador Mauricio Vila, quien apenas asumió el cargo el 1 de octubre. Primero, López Obrador lo felicita su plan de austeridad para el gobierno de Yucatán, con el que pretende ahorrar mil millones de pesos. Y llama a que todos los gobernadores hagan lo mismo.
Luego, lo que le toca por su labor en materia de seguridad, como alcalde de Mérida, cargo que tuvo en la anterior administración. “Mucha gente se ha venido a vivir a Yucatán, paisanos, porque aquí se ha mantenido la seguridad, y hay que reconocerlo”.
Este sábado, continúa la Gira del Agradecimiento de López Obrador por el sureste. Campeche, con el mandatario Alejandro Moreno, y un encuentro con los mandatarios de los cinco estados del Tren Maya.
