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Pemex anunció que vive una crisis que le ha generado una caída en la producción de petróleo.
En contraste, en los últimos cuatro años aumentó la contaminación ambiental en siete estados con actividad petrolera, con derrames que no han sido saneados en zonas agrícolas, acuícolas, pecuarias y poblacionales de Tabasco, Nuevo León, Puebla, San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz y Chiapas.
Es decir, hoy Pemex está produciendo menos pero está contaminando más con derrames de petróleo, debido a fallas en la exploración, en la producción, en el refinamiento y en el transporte de los combustibles.
A ésto se le suman errores humanos, fugas por mala infraestructura y la ordeña de ductos por la delincuencia organizada.
Datos obtenidos por Grupo Cantón vía Transparencia, refieren que del 2014 al 2017 Pemex tiene registrado 340 pasivos ambientales (derrames no saneados), mismos que han aumentado 580 por ciento, al pasar de 50 a 211 en ese período.
Respecto a los pasivos, el documento señala que en 2014 Pemex reportó 50 casos; para el 2015 se redujo a 18; sin embargo, para 2016 creció a 61 y para 2017 el número llegó a 211.
EN MUNICIPIOS
Cabe señalar que en Tabasco, con 83 pasivos, los municipios más afectados son Cárdenas, Huimanguillo, Centro, Comalcalco, Centla, Cunduacán, Jalpa de Méndez y Nacajuca, donde concentra la mayor parte de la actividad petrolera.
En ese mismo período, de 2014 al 2017, la producción petrolera se fue en picada, al pasar de dos millones 428 mil 800 barriles diarios, a un millón 950 mil 200 barriles, lo que significa una caída del 24.5 por ciento, unos 478 mil 600 barriles por día.
Con información de Faustino González Cruz
