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DE FRENTE Y DE PERFIL
RAMÓN ZURITA
El PRD está mal y de malas, al derrumbe tenido en el proceso electoral, donde solamente alcanzó el cinco por ciento de los sufragios y una pobre representación en el Congreso, se suma ahora la posibilidad de que Jesús Zambrano no sea senador plurinominal.
Los Chuchos es la corriente principal dentro del partido del sol azteca, donde sus máximos exponente son Zambrano y Jesús Ortega, quienes han dominado al interior del partido desde hace más de una década, por lo que el no arribo de Zambrano al Senado representaría un duro golpe para ellos y el propio partido.
Siendo un partido disminuido que todavía enfrentará la fuga de legisladores, los Chuchos requieren de fortaleza para tratar de enderezar al partido, aunque ya hay algunos que piensan en mejor fundar otro con los restos del PRD.
Los Chuchos han sido los dominantes dentro de la estructura partidista con varios de sus miembros como dirigentes nacionales, algunos que ya los abandonaron como Guadalupe Acosta y otros que siguen vigentes como los Jesús, Ortega y Zambrano, y el gobernador de Tabasco, Arturo Núñez, pero optaron por entregarle el partido a Miguel Ángel Mancera.
Con la escasez de corrientes con fuerza dentro del PRD, Los Chuchos se perfilan para mantenerse al frente del partido y tratar de recuperar adeptos, y son los que menos posibilidades tendrían de sumarse con Morena y con el grupo compacto de López Obrador.
Ortega y Zambrano fueron críticos contumaces del próximo presidente de México y uno de los principales motivos para que AMLO y sus huestes dejaran de militar en el PRD. Incluso Ortega fue coordinador de la campaña presidencial de AMLO hace años, sin que eso permitiera una buena relación entre ambos. Todavía el año pasado Los Chuchos y su alfil, Juan Zepeda, se negaron a hacer alianza a favor de Delfina Gómez, lo que impidió el triunfo de esta en EDOMEX.