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Hay un refrán muy conocido que dice “me salvó la campana”; este consiste en evitar una situación de desagrado por otra situación fortuita. Con esta suerte, una mujer que había sido declarada muerta en Karachi, Pakistán, volvió a dar señales de vida este miércoles mientras su cuerpo estaba siendo lavado durante los preparativos para su funeral.
La muerte de Rasheeda Bibi, de 50 años, fue certificada por los médicos del hospital Abbasi Shaheed, quienes emitieron incluso una partida de defunción.
“Su cuerpo llevaba ya 20 minutos en la morgue y habíamos empezado a lavarlo”, contó Shabana, la hija de la mujer, a The Express Tribune.
Según relató, fue entonces cuando una mujer que presenciaba el proceso se dio cuenta de que las extremidades del cuerpo de la supuestamente fallecida se estaban moviendo. “Nos lanzamos a comprobarle el pulso y vimos que respiraba“, dijo.
La mujer fue ingresada nuevamente en el hospital, donde está recibiendo tratamiento.
