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TLALNEPANTLA, EDOMEX. – Las escenas de los asaltos a transporte público en el Estado de México son dignas de cualquier película de terror, pues la incapacidad de las autoridades para frenar este delito ha generado el surgimiento de muchos vengadores anónimos que hacen frente a los delincuentes, lo que ha provocado sangrientas balaceras a bordo de las unidades en las que han perdido la vida muchas personas inocentes.
“Todos los días sale uno de su pobre casa con el Jesús en la boca, pues los delincuentes se suben a atracar a punta de pistola a todas horas del día y la gente ya está harta de tanta chingadera, por eso es que muchos usuarios ya viajan armados y eso ha provocado balaceras como la que presenciamos hoy. Es como una ruleta rusa porque no sabemos a quién le van a tocar los balazos”, dijo María Guadalupe “N”, una de las víctimas de un asalto a un camión de pasajeros en Tlalnepantla.
La balacera entre un asaltante y un justiciero dentro del camión dejó saldo de un muerto y tres pasajeros lesionados sobre avenida Jesús Reyes Heroles y avenida Tlalnepantla-Tenayuca. Este tipo de escenas de terror ya son recurrentes en las unidades de transporte público mexiquense y se ha convertido en una cruda realidad para los millones de usuarios que no sólo ven en peligro sus pertenencias, sino también sus vidas.
SEIS EN 48 HORAS
Tan solo en un lapso de 48 horas, seis personas murieron en varios atracos a transporte público. El primer caso, en San Vicente Chicoloapan, un delincuente se subió a atracar una combi pero fue enfrentado a balazos por el policía de investigación de la Procuraduría capitalina, Francisco Valencia Flores.
En la balacera perdieron la vida en el lugar de los hechos el agente, el asaltante y dos civiles más. A las pocas horas un chofer de la Ruta 31 fue acribillado tras resistirse a un asalto en Avenida 16 de Septiembre y Calle 2, en la colonia Alce Blanco, en Naucalpan Pero pese a que son constantes las denuncias públicas a través de videos publicados en redes sociales, donde se muestran a los agresores en flagrancia, ninguna autoridad hace nada por combatir este delito.
