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Por: Mario Berha
Hace algunos días me di la oportunidad de ir al emblemático Marrakech o Marra pa´los cuates.
Si usted no conoce El Marra se lo describo rápidamente: Se encuentra en el centro de la CDMX en la calle República de Cuba #18, Centro histórico, muy cerca de Bellas Artes y eje central. Es un espacio emblemático para la comunidad LGBT+, un espacio donde puedes ir a bailar, convivir con tus amigxs y ¿por qué no? echar unos tragos (más baratos que un antro convencional).
En el lugar ponen música variada desde la clásica “cumbia del monje” hasta el perreo más nuevo como el “mamarre mamarre”, literal, es un lugar de arrabal donde cualquier persona se la puede pasar increíble, no importa la clase social, edad (+18), o preferencia sexual.
Luces de neón, retratos en óleo, hasta un mural de Emiliano Zapata semidesnudo arriba de su caballo adornan este congal. Además en la puerta de El Marra te dan la bienvenida las Drags más emblemáticas y carismáticas del centro de la ciudad. Y a media noche ya que los ánimos están en su pleno apogeo te dan un show y el plato fuerte son los chacales que se suben a bailar y te enseñan toda la mazacuata.
En el título de mi columna es El Marra retoma la magia del arrabal y es que es una realidad, mi Marra querido había perdido esa magia que te hacía sentir como en casa y seguro. Pero esta ocasión fui y me la pasé de lo lindo, recordé aquellas ocasiones donde la noche se te pasaba en un abrir y cerrar de ojos.
Y es que en una plática Ernesto, el nuevo gerente de el lugar, quieren recuperar aquellas noches de arrabal que eran inolvidables, además de generarle a sus clientes una seguridad que no tendrán en otro lado poniendo en alto el concepto de “Bar o antro antro GAY” (Pero todos son bienvenidos).
Te invito a que visites El Marra este emblemático lugar, es una excelente opción para este fin de semana.
