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A lo largo de los años hemos visto más de una decena de producciones que han tocado la historia de El rey Arturo y la espada Excalibur, y es que no se puede negar que la historia envuelve misticismo, la leyenda y la combinación de época medieval con caballeros, magia y una espada que elige a un salvador, son algo que puede ser muy fructífero en la pantalla grande, pero desafortunadamente son pocas las producciones que han logrado destacar y convertirse en trascendentales, es por eso que con Nacido para ser rey, encontramos una cinta que apela a un factor muy importante, la niñez y la imaginación, factores que la convierten de inmediato en una cinta valiosa y poseedora de un mensaje fundamental, en nosotros está el ser rectos y valientes para cambiar nuestro destino.
La historia nos habla de Alex (Louis Serkis, hijo del famoso Andy Serkis), quien es un niño británico de doce años cuyos problemas diarios de bullying y maternales, pasan a segundo plano cuando descubre la mítica espada Excalibur, en un edificio abandonado mientras huye de dos abusadores. Ahora, con la espada más poderosa de la historia en manos del estudiante más desvalido de Inglaterra, una aventura de épicas proporciones comienza a gestarse, toda vez que Alex y sus nuevos amigos tendrán que contener a una infame villana medieval de nombre Morgana (Rebecca Ferguson), quien está empecinada en destruir el mundo y poseer para sí, la legendaria espada en la piedra.
De los puntos más importantes en la cinta sin duda es la sensibilidad en el guion y en el tratamiento de los personajes, convirtiendo a cada uno de ellos en entrañables, dotándolos de características únicas, creando de manera automática y sincera, empatía hacia la travesía que nuestros protagonistas encaran, una mención en especial al querido Merlín, interpretado de manera magistral por Angus Imrie y por Patrick Stewart, eso, aunado a que la historia es sumamente entretenida, muy inteligente y bien estructurada, llena de acción, la vuelven un baluarte para las nuevas generaciones, pues encontraran una producción sumamente ferviente con un mensaje fundamental hoy en día, todos podemos cambiar nuestra vida y nuestro alrededor con valentía y confianza propia. Una historia que apela a la imaginación y a la niñez, que incluso los adultos tendrán a bien encontrar de nueva cuenta, pues harán un viaje al pasado con harta nostalgia.
Una de las problemáticas podría considerarse la duración de la película, que podrían encontrar innecesaria en ciertos puntos, pues se alarga de manera poco convincente, pero con paciencia e imaginación, sin duda el resultado valdrá la pena, pues los caminos que deberán enfrentar estos valientes chicos, se entrelazan de manera exacta; otro punto negativo es el de la villana, que poco o nada ofrece para destacar de entre el mar de emociones que obtenemos al mirar cada escena, su único propósito era ser una piedra en el camino y parece que ni siquiera hubo un esfuerzo mayor en volverla un verdadero problema, se termina lidiando con esto de forma simple.
Ahora la batalla está en nosotros, Nacido para ser rey, es una cinta que más de uno repetirá con emoción, pues el tratamiento diferente y único a la historia que todos conocemos sobre el Rey Arturo y Excalibur, la dotan de frescura y gran ligereza, siendo esta un producto disfrutable para quien la ve, y en especial los niños, que la van a adorar y se van a identificar sin reparo alguno con nuestros protagonistas, y quien sabe, tal vez alguno de nosotros se convierta en el próximo rey, con un poco de imaginación.
Calificación: Muy buena