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El exdelegado dejó enquistada a su pandilla política y sus formas de corrupción.
Ian Soriano
Álvaro Obregón es una alcaldía en la que se aparece el fantasma del dos veces exdelegado, Leonel Luna Estrada, por ello, los actuales empleados de bajo perfil junto con algunos otros ya cesados, dijeron sentirse incómodos porque Layda Sansores haya heredado del Gobierno del perredista a los exPanchitos.
De acuerdo con el testimonio de empleados del Gobierno en turno, Francisco Velázquez, conocido en los años 80 como El Veloz, hoy forma parte del primer círculo de trabajadores de confianza de la alcaldesa, perteneció al gabinete de Luna y también fue uno de los 500 integrantes de la banda de Los Panchitos.
Personal que labora en la alcaldía aseguró a este diario que Luna dejó enquistada a su pandilla política y sus formas de corrupción.
Pusieron como ejemplo el caso de otro exPanchito, Humberto Morgan, quien a pesar de que no trabaja en Álvaro Obregón, “dejó en el área jurídica a sus abogados, que son quienes hacen los manejos sucios como permisos y cuestiones de obras; son incondicionales”.
A los trabajadores les parece sospechoso que aunque Morgan Colín labore en el área de Seguridad de la alcaldía Miguel Hidalgo, siga teniendo influencia en el territorio que gobierna la morenista Sansores.
Los habitantes de Obregón reconocen en los mandos medios (también herencia de Luna) de áreas como la Jurídica a personal gris, corrupto y soberbio.
SIGUE FIRME
Entre los empleados que sobrevivieron al cambio de delegación a alcaldía corre el rumor de que Luna tiene injerencia en 189 inmuebles de AO
AUN VIGENTES
La pandilla Los Panchitos surgió en 1978 en las colinas de Álvaro Obregón (Tacubaya, Observatorio, Santa Fe).