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REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La emblemática avenida Paseo Colón, alguna vez símbolo de orgullo para los habitantes de Toluca, se ha convertido en motivo de vergüenza y preocupación para las familias que viven o transitan por la zona.
El robo sistemático de bancas, el deterioro de jardineras y la acumulación de basura son señales claras del abandono que, según denuncian vecinos, se ha profundizado ante la inacción del gobierno local.
“Da tristeza ver cómo se la llevan pedazo a pedazo. Primero desapareció una banca, luego otra… ahora ya ni las bases quedan”, relata angustiada la señora Teresa, madre de dos niños pequeños que acostumbraban jugar en los andadores de la avenida.
Como muchos otros, ha optado por no salir por las tardes, temerosa de los grupos que operan impunemente incluso a plena luz del día.
Los testimonios coinciden: los delincuentes actúan con calma, utilizando herramientas para desmantelar las estructuras metálicas en varias etapas. A pesar de que ciudadanos han captado estos actos en video y los han difundido en redes sociales, no ha habido respuesta efectiva por parte de las autoridades. “No se ve una patrulla ni por equivocación. Y si pasa, parece que no ve nada”, reprocha un comerciante que ha sido testigo directo del robo de mobiliario frente a su local.
A esta problemática se suma la presencia creciente de basura, sobre todo en zonas como Calzada Al Pacífico y Paseo Matlatzincas. “Uno ya no sabe si está caminando por una avenida o por un tiradero”, lamenta don Arturo, adulto mayor que recuerda cuando el Paseo era un sitio de encuentro familiar y esparcimiento.
El Código Penal del Estado de México contempla sanciones por el robo y daño a la infraestructura urbana. No obstante, en la práctica, los vecinos perciben un vacío de autoridad que permite que estos actos continúen sin freno.
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