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Padres de familia del Jardín de Niños Diego Rivera, en Santiago Miltepec, protestaron el jueves ante un brote de coxsackie y escarlatina en los alumnos
REDACCIÓN, GRUPO CANTÓN
La preocupación y el enojo crecen entre los padres de familia del Jardín de Niños Diego Rivera, en la comunidad de Santiago Miltepec, de municipio de Toluca donde un brote de coxsackie y escarlatina ha puesto en riesgo la salud de los menores.
Pese a que desde el 17 de marzo se reportaron los primeros casos, la Secretaría de Salud del Estado de México, no tomó medidas preventivas para frenar la propagación, lo que ha derivado en al menos nueve niños contagiados: siete con la enfermedad de manos, pies y boca, y dos con escarlatina en su cuerpo.
El jueves un grupo de padres se manifestó a las afueras del plantel para exigir acciones urgentes de las autoridades sanitarias. Con pancartas en mano, denunciaron que, hasta el momento, no se ha implementado un protocolo efectivo de contención y que las medidas tomadas por la escuela han sido insuficientes al momento.
“Nos dicen que les pongamos cubrebocas y que limpiemos con cloro, pero eso no es suficiente cuando se trata de enfermedades tan contagiosas en niños pequeños. Exigimos una desinfección completa y una estrategia real para proteger a nuestros hijos”, reclamó Ana Beltrán, madre de uno de los menores afectados.
Las familias aseguraron que el primer caso de coxsackie fue detectado hace más de dos semanas. A pesar de ello, las clases no fueron suspendidas y la comunidad escolar no fue alertada de inmediato. Con el paso de los días, más niños comenzaron a presentar síntomas, como fiebre, ampollas en la boca y sarpullido en manos y pies, característicos del virus coxsackie.
El 26 de marzo, se confirmaron los primeros casos de escarlatina, una infección bacteriana que puede derivar en complicaciones graves, si no se trata oportunamente.
A pesar del evidente riesgo de propagación, tanto las autoridades educativas y de salud decidieron optar por minimizar el brote de contagio en el centro escolar para tratar de controlar la situación, pero el enojo y preocupación de los padres de familia, se desbordó.
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