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Por segunda ocasión el poder judicial favorece a la tauromaquia pese a que en el país estos espectáculos están prohibidos en cinco estados
OMAR MONTALVO
Ciudad de México. – El juez federal Gaspar Paulín Carmona del Décimo Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa desde una sesión extraordinaria aceptó la queja 70-2024 de La Plaza de Toros, para realizar las corridas taurinas, pese a que previamente la asociación animalista “Todas y Todos por Amor a los Toros” promovió un amparo para suspender esta actividad.
“Consideramos que serían inoperantes los distintos razonamientos que hace valer la parte recurrente, en los que aduce que las normas cometidas, atentan contra, o más bien, preservan la tradición cultural taurina y diversos derechos reconocidos constitucionalmente” declaró el magistrado Gaspar Paulín al presentar el proyecto para desechar la suspensión de las corridas de toros.
El argumento al que recurrió el juez federal fue que la suspensión de las corridas de toros en la Ciudad de México impactará de manera negativa a los involucrados en estas actividades, así como los derechos de terceros, pues la tauromaquia aún es considerada una actividad legal, más porque La Plaza de Toros cuenta con una autorización para la celebración de este tipo de eventos otorgado desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Este revés a los colectivos y asociaciones animalistas desecha por segunda ocasión los amparos para suspender la tauromaquia. El proyecto fue aceptado por unanimidad dentro de la sesión extraordinaria.
“No es viable paralizar estas actividades, estos eventos de tauromaquia hasta entonces no se resuelva en el fondo sí efectivamente estas normas puedan ser inconstitucionales o inconvencionales” declaró Paulín Carmona, confirmando así la realización de los eventos taurinos de aniversario programados el 4 y 5 de febrero en la Plaza de Toros.
La constante suspensión y quejas entre La Plaza México y asociaciones animalistas se debe a que no se conjugan las distintas leyes aplicables, sin embargo, en el país ya hay al menos cuatro estados en los que la tauromaquia está prohibida.
En Sonora desde 2013 quedaron prohibidas las corridas de toros, en 2014 le siguió Guerrero, al próximo año se sumó Coahuila, para 2019 Quintana Roo y en 2022 hizo lo propio el estado de Sinaloa. De forma contraria la tauromaquia ha sido declarada como un bien cultural y material en Aguascalientes, Tlaxcala, Hidalgo y Zacatecas.
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