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marzo 28, 2024

Voces

Arreando al Elefante | El consumo en las élites

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Ana María Vázquez 

Temblores, ansiedad, falta de sueño, irascibilidad, brotes sicóticos, daño cerebral, micro infartos, etc. Lo vi de cerca mientras me preguntaba: ¿fue el alcohol lo que los indujo a consumirlo o fue al revés?, ¿fue el pertenecer o el socializar?, en mi paso por Televisa trabajé con dos productores que eran particularmente “exitosos”, sus oficinas siempre estaban repletas de “amigos” y había reuniones a puertas cerradas en las que el alcohol se bajaba con coca. Todos en la empresa lo sabíamos y pocos eran los que como en mi caso, solo íbamos a trabajar.

Una droga clasista, si la inhalas eres “nice”, si la fumas o te la inyectas estás en el nivel más bajo. El que les surtía el producto no era rico pero tampoco le faltaba trabajo, era usual tenerlo como asistente, extra, o con algún papel que le garantizara la entrada frecuente a estudios y oficinas con cierta discreción, aunque todos sabíamos quién era y que por supuesto solo iba con los “mandos medios”. Luego estalló el escándalo de las camionetas cargadas de droga con el logotipo de Televisa en el que a una de las detenidas se le rastrearon llamadas con el entonces director de información Amador Narcia.

Aunque la empresa se deslindó no pudo evitar la explosión de actores y productores que fueron ingresados en OCEÁNICA para controlar su alcoholismo pero había más en su ingreso, había cocaína que, convertida en adicción llevaba a “manchar” socialmente el “buen nombre” de la empresa. Luego de ello, hubo una campaña interna de “vida saludable” y los pasillos se llenaron de leyendas que ponderaban una vida sana.

En mi paso por la empresa vi morir gente adicta, quedar imposibilitada por daño cerebral, perder lo poco o mucho que tenían por las drogas. Fue una época en la que la visión del inframundo era muy semejante a lo que sucedía tras las puertas cerradas de algunos “productores” entre catálogos, jovencitas que pedían oportunidades, alcohol y drogas. Dos puntos a mi relato: 1.- El traficante sigue “trabajando” ahí y es una
voz muy frecuente y requerida en las empresas de doblaje. 2.- Siempre estuvo bien visto por las élites el consumo, aún ahora que, empresas como esta, disfrazan su estructura de “vida sana”.

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