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Luego que explotó un escándalo de presunta corrupción en las fuerzas básicas de los Pumas, la directiva decidió que el director no fue encontrado culpable
Carlos Horta Martínez
Después de las investigaciones que se realizaron en torno a supuestos casos de corrupción que involucraron al director de Fuerzas Básicas de Pumas, Raúl Alpízar, no fue encontrado culpable sobre las cuotas que, presuntamente, pedía a los jugadores de las categorías inferiores para tener minutos en la cancha, así lo indicó un comunicado de Pumas, por lo que el club determinó reinstalarlo en su cargo.
La investigación fue encabezada por el doctor Miguel Mejía Barón, y de igual forma fue quien decretó que Alpízar volviera a sus funciones, de las cuales había sido temporalmente separado tras la difusión de información en la que se aseguraba hacía cobros a padres de familia para que sus hijos tuvieran minutos en las distintas categorías del equipo.
“Después de revisar y analizar toda la información recabada, el Club Universidad Nacional concluyó que no se cuenta con ningún elemento que determine o compruebe algún acto de corrupción y por lo tanto se ha determinado reincorporar en sus funciones a Raúl Alpízar como director de fuerzas básicas y al visor Esteban Alberto González a partir de este día.
“El Club Universidad Nacional es una institución que tiene como uno de sus principales objetivos la formación de jugadores en beneficio del futbol mexicano. Ante esta situación, ha determinado cimentar una estructura que evite cualquier acto de corrupción al vigilar, transparentar y legitimar el ingreso, la permanencia y la baja, según sea el caso, en las fuerzas básicas de Pumas”, explicaron a través de un boletín informativo.
Cabe destacar que el proceso requirió el testimonio de familiares de los supuestos afectados, y de esta manera determinaron que no había pruebas contundentes contra Alpízar, por lo que volverá a estar al frente de la dirección de las Fuerzas Básicas auriazules.
Una madre fue la que dio a conocer los supuestos cobros que Alpízar hacía a los jugadores de la Sub 18 para que tuvieran minutos, por lo que el Club Universidad Nacional tuvo que emitir un comunicado y, posterior, el mismo Raúl dijo que estaba dispuesto a encarar a la persona que lo acusó.
Dichos pagos mensuales oscilan entre los 4 y 8 mil pesos, señalaron los padres de los futbolistas.
Mientras tanto, Esteban González presuntamente exigió entre 149 y 179 mil pesos por registrar a los infantes en los conjuntos de las divisiones inferiores de los felinos.
FRASE
“Después de revisar y analizar toda la información recabada, el Club Universidad Nacional concluyó que no se cuenta con ningún elemento que compruebe algún acto de corrupción”: DIRECTIVA DE PUMAS
