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La naturaleza tiene una forma de sorprendernos y quitarnos de la boca la frase “yo ya lo he visto todo”. Uno podría pensar que un guía turístico debe ser consciente de lo que puede encontrar en su recorrido; más equivocados no podríamos estar.
La escena ocurrió en la ciudad de Barberton (Mpumalanga, Sudáfrica), cuando Jérémy Schalkwijk se disponía a mostrarle a su pareja un estanque con peces. Allí percibieron el momento en que un arácnido arrastraba a su presa, un pez dorado, por una de las paredes del pozo, sosteniéndola con sus patas delanteras.
Lo que más impresionó a Schalkwijk fue ver cómo la araña se las arreglaba para transportar un pez que era casi del “doble de su peso“. Señaló que aunque estaba al tanto de que esos artrópodos podían pescar, nunca pensó que lograran hacerse con algo tan grande.
“Fue un espectáculo loco. No se ve eso todos los días”, afirmó Jérémy, quien no desaprovechó la oportunidad para captar con su cámara lo sucedido.
Spider carrying goldfish out of a pond
