Visitas
Esteban Durán
Con libro en mano, el presidente Andrés Manuel López Obrador se presentó en la habitual conferencia de prensa y anunció, al mismo tiempo que mostraba el ejemplar, que hoy ya estaría a la venta en línea, su cuarta obra titulada “Hacía una economía moral”.
El jefe del Ejecutivo señaló que el libro tendrá un tiraje de 40 mil ejemplares y agregó que en esta edición, como en todas, hubo errores los cuales ya se están corrigiendo, por lo que habrá una segunda edición.
Con una amplia sonrisa en su rostro el mandatario comentó “Nada más presumirles que ya está; me dice la librería que a partir de mañana (miércoles), va a estar en plataforma, en las ventas que se hace por internet”.
“Aquí está el fundamento de nuestra política, lo que se aplica en el periodo posneoliberal. Ya ven que decían que no había de otra; aquí está el modelo alternativo. Hacia una economía moral”, expresó.
En el nuevo ejemplar “Hacia una Economía Moral” López Obrador expone que el modelo neoliberal mexicano, es una copia de lo que fue el porfirismo, calificándolo como neoporfirismo.
Corrupción, problema político y económico
“La corrupción es un problema político y económico, que de manera absurda ha sido catalogada como un problema cultural”, lo cual exhibo en el libro, recalcó el Presidente y como ejemplo leyó un pasaje de la obra: apenas desembarcó en Veracruz el conquistador Hernán Cortés, y sin fundamento legal, se autonombró alcalde y jefe del ejército invasor”.
“Fue el primer fraude”, apuntó. Incluso, luego de “moches iniciales”, cuando llegó la hora de repartir el botín, Cortés se dio otro “quinto” a sí mismo y los soldados recibieron cuotas menores.
En la República restaurada, explica en la publicación, hubo comerciantes que lucharon contra los franceses sin cobrar. Recordó que Vicente Riva Palacio abandonó el ejército y se retiró a la vida privada, básicamente a escribir, y poco después, el presidente Benito Juárez le cuestionó que no haya cobrado su sueldo como militar, ante lo cual el escritor respondió: “A la patria se le sirve, no se le cobra”.
Con el Porfiriato impera la corrupción, continuó el presidente López Obrador.
Explicó que en ese periodo se vendieron concesiones del ferrocarril por debajo de su precio pero al final del régimen de Díaz se compran las concesiones, “fue como un Fobaproa”.
Antes de comprarse las concesiones, José Yves Limantour, secretario de Hacienda en el Porfiriato, adquiere las acciones a precios por los suelos, y cuando el gobierno compra las acciones ya tenía otro valor, “porque tenía información privilegiada”.
Así lo están entendiendo las empresas que vienen a México a invertir, y la prueba es que está creciendo como nunca inversión extranjera porque hay estabilidad, y no hay corrupción, agregó el presidente López Obrador.
Al ligar este tema con la forma en que se concursaban licitaciones de obras públicas en gobiernos anteriores, afirmó que había empresas predilectas de cada administración. Con Felipe Calderón, dijo, la empresa predilecta fue Repsol, y en el sexenio pasado fue OHL, ambas españolas.
Hubo el caso de una licitación que ganó Carlos Slim, pero se le entregó al final a OHL y como excusa esgrimieron que la empresa de Slim no tenía solvencia económica, agregó.
El jefe del Ejecutivo señaló que analiza qué hará con las regalías. Con su libro anterior, aseguró, entregó parte a los damnificados de los sismos.