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Ciudad de México.– Cuando Ricardo Peláez tomó el teléfono para pedirle ser parte de un proyecto nuevo, luego que juntos vivieron glorias siendo parte del América, Pablo Aguilar decidió aceptar el reto con Cruz Azul.
Y, luego de una Final fallida en el Apertura 2018, que otra vez La Máquina terminó por perder ante el conjunto de Coapa, para el actual ciclo, aunque las cosas no van bien, pero parecen mejorar, en el plano individual el defensa central paraguayo vive su mejor romance con las redes enemigas desde que llegó al futbol mexicano para enrolarse con el San Luis.
Aguilar al momento, contando su anotación que significó el empate ante los cremas el sábado pasado, contabiliza cuatro alaridos en lo que va de este torneo.
El número más alto de Pablo en su andar por los llanos de México era tres, cuando vistió las casacas de los millonetas y Xolos, y se espera pueda subir la cuota cuando al actual certamen aún le restan cinco fechas.
Ante FC Juárez, Tijuana, el Monterrey y la escuadra aguilucha, el zaguero guaraní se hizo presente marcando.
Con la especialidad de la casa, el remate con la cabeza, el ‘23’ de los cementeros se hizo presente.
Uno de sus goles más recordados jugando en el circuito azteca fue en la Final del Apertura 2013 ante Tigres, como americanista, en el partido de Vuelta en la cancha del Estadio Azteca.
