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FERMÍN SÁNCHEZ
CIUDAD DE MÉXICO.– A 1 un día de cumplirse 51 años de la Matanza de Tlatelolco, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a los manifestantes que asistan a la marcha del 2 de octubre, a que actúen de manera pacífica y responsable, pues reiteró que no habrá actos de represión.
“No somos un gobierno represor, nosotros surgimos para que nunca más se reprima al pueblo, que nunca más sucedan hechos tan lamentables como la represión del 2 de octubre del 68 a los estudiantes. Nosotros llegamos aquí para que no se repitan esos hechos, este no es un gobierno autoritario”, afirmó.
AMLO pidió a los asistentes que le ayuden para que no haya destrozos, y que actúen como lo hizo Mahatma Gandhi, Nelson Mandela y Martin Luther King, indicó que en la marcha habrá vigilancia, pero no represión.
Le pidió a todos los participantes a que ayuden y que si se infiltran provocadores, los aíslen y los mantengan separados, “nosotros, que venimos de oposición, sabemos cómo se puede evitar que actúen provocadores: con organización, bastante organización de los manifestantes”.
AMLO respaldó la iniciativa de la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, para que los ciudadanos hagan cordones humanos para proteger sitios históricos de vandalismo. Obrador ha calificado de manera reiterada a esos contingentes como conservadores, asegurando que no pueden ser de izquierda ni anarquistas, añadiendo que son provocaciones que “le hacen el juego a la derecha”.
REPRESIÓN CON PEÑA
Y es que el sexenio de Peña Nieto, fue un periodo brutal para el ejercicio de la protesta social, así lo describe el documento La resistencia: informe sobre la protesta social y la respuesta estatal 2012-2018, realizado por el Frente por la Libertad de Expresión y la Protesta Social (FLEPS) en el que se documentó que tan sólo de julio de 2015 a noviembre de 2018, se dieron 175 casos de represión a quienes protestaban en varias entidades del país, en la que participaron desde policías estatales, federales y elementos de las fuerzas armadas.
Del total de casos de represión documentados en el informe, 57 se dieron en la CDMX, 17 en el edomex, 17 más en Oaxaca y 14 en Michoacán. Dos de los casos más emblemáticos son: Nochixtlán, Oaxaca, en 2016, y Tiripetío, Michoacán, en 2017.
