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DAVID CASCO/FERMÍN SÁNCHEZ
CIUDAD DE MÉXICO.– Alejandro Alito Moreno Cárdenas aún no es ungido como el candidato para dirigir los destinos del Partido Revolucionario Institucional, y ya está provocando divisiones, deserciones y cismas en el tricolor.
Desde que el entonces gobernador de Campeche levantó la mano para suceder a Claudia Ruiz Massieu Salinas en la dirigencia del PRI, empezaron los reclamos. El ahora mandatario con licencia dispuso de todos los recursos estatales para promocionarse y dejó en bancarrota a su entidad, además de que dividió a su partido.
En su momento, tanto José Narro como Ulises Ruiz e Ivonne Ortega –los otros tres precandidatos por la silla tricolor– coincidieron en algo: la cargada a favor del campechano, el dispendio en una abierta precampaña y que el proceso interno es una simulación para favorecer a Alito.
En este tenor, ayer dos priístas se bajaron del barco: primero, y a través de un video, José Narro Robles renunció a su militancia de 46 años en el partido y, por ende, a su aspiración a dirigirlo. Y 4 horas después, vía Twitter, la periodista Beatriz Pagés anunció su decisión de dejar al partido, y dijo que el mismo ya se había entregado al Presidente de la República.
Pese al daño que causa la salida de ambos personajes, el PRI emitió un comunicado, donde lamentó la salida de Narro Robles, pero reiteró su compromiso de “seguir garantizando que el proceso de renovación se lleve a cabo en un marco de equidad, neutralidad e imparcialidad”. Nada más alejado de la realidad, frente a los hechos…
REACCIONES EN CONTRA
Parte de la clase política priísta lamentó que José Narro Robles renunciara al tricolor, a su militancia de 46 años en el partido y se bajara de la competencia por la dirigencia nacional del PRI, la cual peleaba junto a Ivonne Ortega, Ulises Ruiz y Alejandro Moreno, y es que el exrector de la UNAM afirmó que no quiere ser parte de la simulación, porque ya está decidido quién será el próximo líder del PRI.
A través de un video difundido en sus redes sociales, comunicó: “Hoy hago pública mi decisión de renunciar a formar parte de la simulación en el proceso de elección de la nueva dirigencia de mi partido, pero también mi renuncia al PRI, partido en el que milité por más de 46 años”.
Al igual que Narro Robles, la periodista Beatriz Pagés anunció su renuncia al PRI, ya que aseguró “es inaceptable que se haya decidido entregar el partido”.
Y entre los que dieron a conocer su enojo, estuvo Manlio Fabio Beltrones, quién lamentó la renuncia al PRI de Narro e informó que no votará en el proceso interno del próximo 11 de agosto.
Ivonne Ortega, quién es precandidata a la dirigencia, también lamentó la salida de José Narro, y señaló que entiende sus razones, aunque aseguró que justo por eso no se deben rendir en el rescate al partido tricolor.
Ulises Ruiz, el exgobernador de Oaxaca que también es precandidato a la dirigencia tricolor, reaccionó así: “Lamento la renuncia de Pepe Narro, hombre valiente y de principios, y responsabilizo de esto a Alejandro Moreno, quien aún no se registra y ya está fracturando al partido con las trampas y la cargada que para imponerlo en la dirigencia pretende Peña Nieto y los gobernadores”.
En redes sociales más priístas mostraron su enojo y acusaron que Alejandro Moreno ya pactó con el actual Gobierno y, por ello, será el próximo dirigente de su partido. De nada importó el cochinero que dejó en Campeche…
