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El asesinato de la periodista tabasqueña Norma Sarabia, conmocionó al mundo. Medios de comunicación de países como Alemania, España, Francia y Estados Unidos condenaron el hecho, mientras que en México y Tabasco, los atentados contra periodistas se han vuelto algo común, lamentó Laura Saucedo, representante de la Organización Artículo 19, defensora de derechos humanos.
Y es que más de 20 portales de internet de los periódicos más importantes del mundo, dieron cuenta del asesinato de la periodista tabasqueña, lanzando un grito de alerta por la peligrosidad de esta profesión que cada día recrudece, acumulando a la fecha más de 149 asesinatos documentados, de los que pocos han sido esclarecidos.
Entre los portales de noticias que hicieron énfasis condenado el asesinato de la periodista Norma Sarabia se encuentran: El País y CNN de España, Le Monde y L’EXPRESS de Francia, El Clarín de Buenos Aires, Argentina, The Washington Post de Estados Unidos, el BBC de Londres en Reino Unido, EGEHABER de Alemania, sólo por citar algunos.
LA VIOLENCIA ESTÁ NATURALIZADA
Cuestionada sobre el hecho de que otros países cuestionen duramente las agresiones contra periodistas incluso más que los mexicanos como país origen de los casos, Laura Saucedo consideró que esto se debe a que en México la violencia está naturalizada, pues son tantos los casos y tan cotidiana la impunidad que la sociedad desafortunadamente está acostumbrada al incremento de la violencia, al asesinato de periodistas y a los feminicidios.
“Las averiguaciones que ha resuelto la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Contra la Libertad de Expresión (FEADLE), dan cuenta de la impunidad en más del 99% de los casos, es de esperarse que ante una completa inacción del gobierno, el asesinato de un periodista, incluso los propios medios de comunicación ya no los cubren o para el gobierno es como sumar uno más a la estadística”, fustigó.
La activista social señaló que a pesar de que en noviembre de 2018 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el protocolo homologado para investigar delitos contra la libertad de expresión que incluye el ejercicio periodístico como línea base de la investigación; hasta ahora, ninguna institución de procuración de Justicia está utilizando el protocolo para investigar las agresión contra periodistas en todo el país.