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Ciudad de México.– Por primera vez en sus 94 años de historia la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) disputó dos torneos en un solo año, al estilo del futbol mexicano.
Formato que sólo se apreció en 2018, pues para el año entrante se volverá a disputar una campaña durante el ciclo.
Este experimento provocó que se coronaran dos escuadras distintas, prácticamente como sucede también en el balompié nacional, que desde la creación de los famosos torneos cortos sólo conoce a dos Bicampeones.
Leones de Yucatán y Sultanes de Monterrey fueron las novenas que se coronaron en 2018, la fiera del sur dio cuenta precisamente de los regiomontanos, que tuvieron su revancha seis meses después al derrotar a unos sorprendentes Guerreros de Oaxaca.
RUGEN CON FUERZA
Comandado por Roberto Chapo Vizcarra, Leones de Yucatán terminó la temporada de Primavera como líder de la Zona Sur con 40 triunfos a cambio de 17 derrotas, el mejor récord de todo el circuito.
En el primer Playoff dieron cuenta de Bravos de León, que superó en el duelo de Comodín a Pericos de Puebla por cuatro juegos a uno.
En la Serie de Campeonato, los yucatecos se fueron a lo máximo ante unos Tigres de Quintana Roo motivados por haber eliminado en una Serie previa a su archirrival, Diablos Rojos del México.
Incluso en el séptimo y definitivo, tuvieron que recurrir a los extrainnings para llegar a la Serie del Rey.
Un tablazo de vuelta entera de Jesús Valdez, en la entrada 11, ante los lanzamientos de Walter Ibarra regresó a los melenudos a una definición por el título después de 11 años.
En la Serie definitiva Leones se midió a Sultanes de Monterrey, que fue el mejor de la Zona Norte y, tras siete juegos, se hicieron de la Copa Zaachila en su estadio, el Kukulcán.
Con un 3-4, y una actuación memorable del Pepón Luis Juárez, Jugador Más Valioso de la Serie con siete hits, tres jonrones, uno de ellos de dos carreras en el juego decisivo y seis anotaciones producidas, Yucatán se proclamó Campeón tras 12 años de sequía.
REGIOS MANDONES
Luego del duro golpe recibido en la primera campaña de 2018, Sultanes de Monterrey volvió por sus fueros para la temporada de Otoño.
A pesar de no haber dominado la Zona Norte como en el primer torneo, pues en esta segunda ocasión consiguió 34 victorias por 23 caídas quedando en el tercer puesto del pelotón y dejando el puesto de honor a los Acereros de Monclova con 42 ganados, los Fantasmas Grises vivieron su mejor versión en la Postemporada.
En el primer Playoff superaron a unos aguerridos Toros de Tijuana, Campeones en 2017 por cuatro juegos a tres.
Ya en la Serie de Campeonato, los de Monterrey superaron a la novena con la mejor foja de la Liga, y que había hecho una inversión millonaria para quedarse con el título, Acereros.
Distinto de lo que se pensaba, Sultanes superó con cierta facilidad a la Furia Azul ganando cuatro encuentros y perdiendo sólo uno, para instalarse por segundo certamen consecutivo en la Serie definitiva.
El rival, Guerreros de Oaxaca, había tenido un camino complicado, pero inspirador; en un choque de Comodín dramático, dejaron en el camino a Bravos de León en el propio Parque Domingo Santana de la capital de Guanajuato.
En el primer Playoff, vencieron a los entonces vigentes Campeones, Leones de Yucatán, en el Parque de la Serpiente Emplumada con tres carreras en el onceavo episodio.
En la Serie de Campeonato de la Zona Sur superaron a su hermano, Diablos Rojos del México, contra todo pronóstico, quedándose con la eliminatoria tras cuatro triunfos y sólo dos derrotas.
En la Serie del Rey, a pesar de dar pelea, el conjunto Bélico cayó ante Sultanes, dirigidos por Roberto Kelly, con un final de película.
Con el marcador igualado a dos, el exligamayorista Ramiro Peña sacó un imparable y dejó tendidos en el terreno del Palacio Sultán a los oaxaqueños, para que los regiomontanos levantaran el título de Campeón después de 11 años sin lograrlo.
