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TIROS CON R-15-ARTURO RÍOS
Desde 1970 escuché que la policía preventiva de la Ciudad de México, sería profesionalizada, por eso, Arturo Durazo Moreno, consentido de López Portillo, pidió la compra de un inmueble para fundar el Colegio de Policía.
Se adquirieron las instalaciones de la Universidad Latinoamericana, en la Altavista, en la zona de Tetetelpan y se la pasaron promoviendo la institución sin éxito porque a los jóvenes no les interesaba ser gendarmes, pues el desprestigio estaba en su apogeo, como ahora.
Jesús Orta Martínez, el recién llegado jefe de la corporación, anuncia varias acciones entre ellas dos que llaman la atención porque todo el tiempo se han manejado y han sido un rotundo fracaso.
Habla de la necesidad de una capacitación, esto se dice desde 1970, a estas alturas no creemos en ello y la otra, formación en derechos humanos, con todo respeto, parece demagogia, lo que menos practican los uniformados es eso.
Desde 1993, se habló en la policía que serían respetuosos de los derechos humanos, pero hasta la fecha los atropellos policíacos son públicos , exhibidos tanto en Redes Sociales como en los medios.
Los uniformados tanto de a pie, como los de patrulla y motocicleta, son los mismos mordelones de antaño. Siempre cabe la esperanza. Ojalá y ahora sí.