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CIUDAD DE MÉXICO.– La casa de transición de la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, cada día se percibe más activa, pues el número de capitalinos con diversas necesidades crece al hacer presencia para solicitar su ayuda, dejando documentación personal, con la esperanza de que al tomar posesión tengan acceso a algunos programas sociales y servicios médicos.
Desde las 8 con 30 minutos llegó la próxima jefa de Gobierno de la Ciudad de México a la casa donde despacha, pues tenía en puerta una reunión con varios de sus colaboradores, pero sobre todo con Rosa Icela Rodríguez, pues en orden de importancia será su segunda de a bordo durante los próximos seis años, a partir del 5 de diciembre.
Durante el día de ayer, acudieron a reunirse con Claudia Sheinbaum, Dunia Ludlow, quien será responsable de la autoridad del Centro Histórico, Avelino Méndez, quien será el titular de servicios delegacionales, Alfonso Suárez del Real, próximo secretario de Cultura y otros que serán sus colaboradores.
Mientras tanto, afuera de la casa de transición cuatro personas de la tercera edad esperaban con la esperanza de ver personalmente a la exdelegada de Tlalpan y explicarle todo “el calvario” que han tenido que pasar en diversas dependencias del Gobierno y oficinas de las alcaldías, sin éxito alguno para obtener ayuda, porque a sus 65 años o más, nadie les da trabajo y menos ayuda económica.
Están conscientes que la próxima jefa de Gobierno no puede comprometerse a ofrecerles ayuda, porque hasta el 5 de diciembre próximo asume el cargo, sin embargo, quieren ser los primeros en ser atendidos cuando Shienbaum despache en el Palacio del Ayuntamiento.
Para ello dejaron sus documentos oficiales y conservan el número de folio para estar al tanto de su solicitud.
Doña Sara, don Mario y dos adultos mayores más, relataron que desde hace más de dos años han buscado por todos los medios a su alcance que el Gobierno capitalino los ayude a través del programa de 65 años y más y otros programas sociales, pero el argumento que les dan las personas que los atienden es que ya no hay cupo ni presupuesto, por lo que tendrán que esperar cuando menos 3 años.
“Por eso vinimos a solicitar ayuda de la doctora. Tenemos plena confianza en que nos va ayudar y por eso estamos aquí”.
No faltó la persona que dice conocer a Claudia Sheinbaum desde que eran jóvenes “y éramos pobres”, por lo que don Jorge, empresario, pasó a dejar su tarjeta, esperando que la próxima gobernante de una las ciudades más grandes del mundo se acuerde de él.
También llegó una persona que dijo será representante vecinal, para solicitar ayuda porque cerca la casa de transición una familia corre el riesgo de ser desalojada y el Gobierno actual no quiso brindar ayuda.
