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PACHUCA, HIDALGO.– “¡Fuera Fayad, fuera Fayad, fuera Fayad!”, fue el grito de cientos de jóvenes que interrumpió el discurso que el presidente electo Andrés Manuel López Obrador daba en la Plaza Juárez de Pachuca, ante unas 3 mil personas.
Y era precisamente en esos momentos cuando López Obrador se refería a los temas de la revocación de mandato y el combate a la corrupción, cuando surgió la consigna colectiva.
“Bueno, ya escuché. Ya ven cómo soy yo, que digo lo que pienso y siento. Yo no vengo a eso, porque no soy un dictador. Yo no destituyo a nadie”, comentó Obrador para calmar los ánimos de la gente.
Antes, el presentador en el mitin, había gritoneado por el micrófono, que AMLO “le jaló las orejotas a Fayad”, en referencia a la reunión del Palacio de Gobierno. Y ello arengaba a los presentes para los gritos . “¡Fuera Fayad, fuera Fayad, fuera Fayad!”
El mandatario electo siguió: “No podemos actuar de manera arbitraria. Acuérdense, estamos construyendo una auténtica democracia, no una dictadura. Acuérdense, yo no soy cacique”.
Luego reiteró que los tiempos de campaña ya habían finalizado y ahora se debe de trabajar en bien del país. “Ya pasó la campaña. Tenemos que unirnos todos. ¿O quieren que actuemos igual que antes? ¡Claro que no! Tenemos que actuar de manera responsable y unirnos. Nada de poner por delante intereses personales o sectarismos”, enfatizó López Obrador.
Después de la elección del 1 de julio, Fayad ha mandado mensajes rijosos a AMLO, en particular porque se opone a que el gobierno federal designe a un solo delegado. Además, el golpe legislativo que propinó Fayad en contra de legisladores de Morena que ganaron la mayoría en el Congreso local, fue otro punto de confrontación.
Sin embargo, sí fue extraño que cuando AMLO aceptó responder algunos cuestionamientos de la prensa, al salir de su encuentro con Fayad, una señora no dejó de gritonear mientras se daban sus declaraciones, lo que fue interpretado por algunos periodistas como si hubiese sido una enviada del propio gobierno local, para hacer ruido.
Al final de la entrevista, López Obrador se acercó a la señora, ella se pasó por debajo de la valla para pedirle su atención, y de inmediato el mandatario electo la llevó con uno de sus colaboradores para que atendiera su solicitud de ayuda. Eso sí, en el encuentro de este domingo, Fayad estuvo sumamente atento, hasta le regaló una pelota, guante y bat de beisbol, decorados por artesanos de Hidalgo.
Con información de Alejandro Lelo de Larrea / Grupo Cantón