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La prensa libre le abrió el paso

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VILLAHERMOSA, TABASCO.– Si hay algo que difícilmente podría olvidar el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, es la importancia del periodismo libre, gracias al cual él pudo tener voz en los medios de comunicación, cuando era oposición, lo que le abrió el camino.

“Hace 30 años que yo fui candidato por vez primera (a la gubernatura de Tabasco), era casi ilegal darle voz a la oposición. Tu papá (Jesús Antonio Sibilla Zurita, fundador de Telereportaje), aún así abrió los espacios en su programa.

“Fue muy importante, porque si lo decía el licenciado Sibilla, quería decir que estaba permitido”. Así se lo dijo López Obrador a Chuy Sibilla, el hijo del fundador de Telereportaje, que celebró sus 60 años al aire.

Fue un encuentro de la clase política de Tabasco. A todos ellos convocó la presencia del Presidente electo, quién apretó como pudo su agenda, para hacer un viaje relámpago y no fallarle a sus paisanos.

Partió de la Ciudad de México en el vuelo de las 13:45 horas, y volvió en el de las 18:52. Ambos vuelos comerciales. Solo cuatro horas en Villahermosa. “No he logrado convencerlo que use por lo menos un Learjet (el avión más pequeño)”, dijo Sibilla.

Y como ese noticiario y su tierra ha sido clave en su trayectoria, López Obrador no lo olvida. “Llegar a los pueblos con un respaldo como el de tu papá fue fundamental. Aunque no nos diera espacios de entrevistas, daba a conocer la agenda de nuestra labor, lo que nos protegía de agresiones o medidas autoritarias”.

Y reiteró su felicitación: “Recuerdo mucho a tu padre, y a ti Chuy, que le diste continuidad al programa, y a doña Lety (la madre de Chuy). Su familia es un gran ejemplo para Tabasco”, enfatizó.

Ahí estaban los gobernadores, el electo y el constitucional: Adán Augusto López Hernández y Arturo Núñez.

Y los mandatarios de Chiapas, Manuel Velasco, y de Campeche, Alejandro Moreno. En el estrado, un par de sillones, donde el mandatario electo charló breve con Chuy. A su regreso a México, López Obrador se notaba contento.

Y cómo no, después de ese apapacho y aplausos de más de 500 invitados.

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