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La Jefa de Gobierno electa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, propuso este domingo la agenda de pendientes que discutirá mañana en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento con su homólogo José Ramón Amieva, de cara a la transición que oficialmente da inicio en esta semana entre ambos bandos.
Cero tolerancia a la corrupción, cuentas claras a la Secretaría de Finanzas, atlas de riesgos para la Secretaría de Obras y Reconstrucción por zonas delegacionales es lo que se planteó ayer, tras una serie de encuentros privados con sus asesores en política y finanzas.
La morenista diseñó durante el fin de semana el borrador de lo que planteará al aún Ejecutivo local, último gobernante citadino emanado del PRD.
Sheinbaum Pardo despachó sábado y domingo en sus oficinas de la colonia Portales y sostuvo ayer una reunión privada desde las 13:00 horas con el Coordinador de la Transición, César Cravioto, para dejar en claro cuáles son las prioridades para el nuevo Gobierno en materia hacendaria, social, económica y de reconstrucción.
Por la tarde de ayer, la futura gobernante de la capital diseñó tres asuntos que planteará a sus más cercanos colaboradores. Primero aterrizar el Protocolo para el Cambio de Gobierno que supervisa el Consejero Jurídico, Héctor Villegas Sandoval, segundo, el censo poblacional de damnificados por delegaciones en la capital del país, y tercero, poner en marcha la política anticorrupción del Gobierno de la capital.
En sus oficinas de Sevilla 716, estuvieron presentes el Coordinador para la Reconstrucción, diputado César Cravioto Romero; su futuro secretario de Obras y Servicios, Jesús Antonio Esteva Medina, esto último para darle la instrucción de verificar en qué delegaciones se presentan los mayores riesgos por inundaciones.
Claudia Sheinbaum trató con sus aliados el tema de la transición por Secretarías y se advirtió que las primeras en cambiar de titulares serán Gobierno, de las Mujeres y de Salud, Oliva López Arellano.
Otro de los temas que ayer definió y que este lunes hará patente a su homólogo, José Ramón Amieva, es la fusión de la Oficialía Mayor, que desaparece, así como las más de 35 plazas que estaban en su nómina.
Por la tarde noche, salió de sus oficinas con rumbo a su domicilio, no sin antes definir las posturas que tomará con su predecesor, quien se sabe, le hará varios planteamientos para que ambos gobiernos caminen de la mejor forma hacia la transición rumbo al 5 de diciembre de 2018.
