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El Festival Internacional ha generado inconformidad entre artistas locales, quienes acusan que el programa privilegia a algunos artistas con pagos millonarios
MARIO LÓPEZ
GRUPO CANTÓN
El Ayuntamiento de Metepec presentó el cartel oficial del Festival Internacional Quimera 2025, considerado uno de los encuentros culturales más importantes del Estado de México, pero en esta ocasión genera polémica entre artistas locales, gestores culturales y parte de la ciudadanía, quienes señalan que el programa privilegia a artistas de renombre nacional e internacional, mientras deja en segundo plano a los talentos de la región.
De acuerdo con la información difundida, el festival contará con la participación de agrupaciones como El Tri, Kabah, María León, Ximena Sariñana, y Kalimba, entre otros, quienes concentrarán la mayor parte del presupuesto destinado a espectáculos masivos.

Cifras preliminares estiman que, en conjunto, estas figuras podrían percibir montos que oscilan entre los 800 mil y 1.5 millones de pesos por presentación, en contraste con los pagos simbólicos o limitados a gastos de producción que recibirán colectivos locales de teatro, danza y música tradicional.
Este desequilibrio ha desatado cuestionamientos sobre el verdadero espíritu del festival, que nació en 1991 como un escaparate para las expresiones culturales de Metepec y municipios aledaños.
Críticos señalan que el gobierno municipal, que encabeza Fernando Flores Fernández, prioriza el espectáculo sobre la promoción cultural comunitaria, lo que podría generar un impacto negativo en la identidad local.
Diversas voces señalan directamente la responsabilidad del alcalde Fernando Flores Fernández, pues fue su administración la que aprobó la planeación y asignación presupuestal del festival.

No obstante, la controversia también alcanzó al edil luego de que trascendiera que planea aprovechar la presencia de estas agrupaciones para aventarse con alguno de ellos un “palomazo” en el escenario, un privilegio que difícilmente tendría cualquier ciudadano y que se costea con recursos públicos destinados a la cultura. El gesto ha sido interpretado como un acto de autopromoción política más que de apoyo al talento local.
“Al tiempo”, dijeron vecinos, quienes cuestionan la actitud “protagonista” del alcalde, que de un servidor público a casi cuatro años de gobernar Metepec.
Sectores académicos y culturales piden transparencia en el desglose del gasto, mientras que comerciantes y prestadores de servicios confían en que la derrama económica del festival estimada en más de 40 millones de pesos compense las inconformidades. Sin embargo, voces ciudadanas advierten que el Festival Quimera corre el riesgo de perder su esencia si continúa privilegiando a las grandes figuras por encima de la riqueza cultural de Metepec.
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