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MARIO LÓPEZ
EdoMex.- El Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM), enfrenta una crisis de credibilidad. Bajo la dirección de Miroslava Carrillo Martínez desde 2020, el ente parece más enfocado en emitir reportes que en generar resultados concretos, dejando un vacío en la rendición de cuentas y la recuperación de recursos públicos.
A lo largo de su gestión, el OSFEM ha identificado anomalías por más de 39 mil millones de pesos en auditorías a distintas entidades estatales y municipales. Estas incluyen obras inexistentes, mal manejo presupuestal y opacidad en organismos descentralizados. Pese a la magnitud de los hallazgos, no se ha recuperado un solo peso, y las irregularidades siguen sin sanción ni solución.
Carrillo Martínez ha priorizado investigar municipios pequeños, dejando intocables a localidades con mayores recursos.
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