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Invitan a la ciudadanía a nombrar a la adorable cría de Jirafa en el centro de conservación de Chapultepec.
REDACCIÓN, GRUPO CANTÓN
La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) extendió una cordial invitación a la comunidad para ponerle nombre a uno de los recientes integrantes del Centro de Conservación de la Fauna Silvestre de Chapultepec.
Se trata de un encantador bebé jirafa macho que vino al mundo el 1 de noviembre de 2023 en dicho centro de conservación. Actualmente, el pequeño mide 2.14 metros y es el resultado de la unión entre “Valentino” (el padre) y la hembra “Sicaru”.
.@SEDEMA_CDMX Llama a votar desde hoy y hasta el 10 de febrero por el nombre del nuevo bebé jirafa de Chapultepec.
Los nombres: Tafarí, Zareb,Anuar, Fikru,Thabo, Bekele,
Azizi, Acatzin, Umi, Zuberi, Bartolo o Bartolomeo. ¿Cuál les gusta más?
Le veo cara de Bartolo pic.twitter.com/5GyZlkg5Kr— Alma Paola Wong (@Wongui) January 25, 2024
Este ejemplar de jirafa es un testimonio de una exitosa crianza artificial, también conocida como crianza con biberón o crianza a mano.
El animalito no fue aceptado por su madre, pero gracias al esmero de médicos veterinarios, biólogos y cuidadores de animales, ahora goza de buena salud, según afirmó la Médica Veterinaria Zootecnista Miriam Gabriela Nogueira Marmolejo, enlace de Atención Veterinaria de la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre.
En un comunicado, la experta detalló que actualmente la pequeña jirafa se alimenta con un biberón diseñado para becerros, con una capacidad de más de dos litros.
Aunque la cantidad de leche que consume se ajusta a las necesidades del jirafa macho, actualmente toma 10.8 litros de leche al día, distribuidos en tomas de 2.7 litros cada cuatro horas.
“Nuestro chaparrito nació pesando casi 50 kilos. Le dábamos de comer cada dos o tres horas durante el día y la noche, dependiendo de lo que nos fuera aceptando. Empezamos a las siete de la mañana hasta una o dos de la madrugada para alcanzar el volumen que necesitaba comer y dejarlo descansar en la madrugada”, recordó.
Noriega Marmolejo señaló que todas las crianzas artificiales son desafiantes porque las crías deben aceptar la mamila y la fórmula de leche.
Al principio, es necesario cuidar a los bebés las 24 horas del día durante varias semanas, dependiendo de la especie, ya que la cría debe alimentarse cada dos horas. Con el tiempo, la dieta de las crías se ajusta hasta que pueden consumir alimento sólido, proceso conocido en las especies de mamíferos como el destete.
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