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Luego de que la joven, de 26 años, asistió a recoger sus pertenencias a la casa de su expareja, ya no se supo sobre su paradero.
Redacción Grupo Cantón.
La antropóloga Rita Segato, postula que el amor romántico está fundamentado bajo una visión patriarcal y política, la cual está llena de idealizaciones que violentan a las mujeres. El amor romántico desencadena una serie de actos violentos en las relaciones de pareja, que normaliza la violencia desde una forma romántica, como fue el caso de Jael Martínez quien, al ir a recoger sus pertenencias a la casa de su expareja, desapareció. “Voy a ir a la casa de David” dijo Jael a su madre, durante la mañana de aquel catastrófico día. “Ya no deberías de ir, hija, Ya deja las cosas así, el punto es que ya no lo veas”, expresó la señora mientras le daba un trago a su café. “Pero, ¿y mis cosas?”, replicó la joven de 26 años de edad. “Eso es lo que menos importa, puedes comprarte otras, pero al final es tu decisión”, respondió la madre de familia, con un tono de voz tranquilo, pero tratando de ocultar la preocupación que sentía. “Si voy a ir, mami,” expresó Jael y añadió “Veras que todo estará bien”, señaló Jael mientras se levantaba de la mesa y comenzaba a hacer sus quehaceres cotidianos, para más tarde ir a recoger algunas cosas que había dejado en la casa de David, su expareja.
TRASLADO
Después de ducharse, se puso ropa cómoda, tomó sus llaves y se dirigió a su destino. En el camino la chica no dejaba de pensar en su relación de pareja pues, aunque ya se había fracturado, ella aún le guardaba cierto cariño al sujeto. Mientras el aire entraba por la ventanilla y le pegaba la corriente en el rostro, Jael recordó todos los momentos de felicidad que vivió con él, y una y otra vez se preguntaba:”¿Qué hicimos mal para que la relación terminara así?”.
CASA DE DAVID
Minutos después Jael arribó a la casa de su expareja, quien ya la estaba esperando, por lo que una vez que la joven tocó la puerta, David salió a toda velocidad para invitarla a pasar. “Vengo por mis cosas”, le dijo la joven, “¿Cuáles cosas?”, contestó David con sarcasmo, quien según especulaciones policiales ya tenía todo preparado, pues es el principal sospechoso de la muerte de Jael. Fue así, como la discusión comenzó a subir de tono y cada vez el ambiente se tornaba más tenso, “¡Tú no vas a dejarme, maldita!, presuntamente gritó David, ya casi rosando la ira, “¡No me hables así, cabrón! ¡Ya te dije que ya no quiero estar contigo!”, le respondió enojada Jael. Solo le bastaron esas palabras a su verdugo, para que se le abalanzara y comenzara a golpearla, por lo que entre giolpes, arañazos y gritos la joven trató de defenderse, pero todo fue en vano, pues el supuesto feminicida con mucha ira la asesinó.
DESAPARECIDA
“Llamó para pedir ayuda, pues mi hija Jael Martínez no ha llegado a casa,¡Estoy muy asustada!”, dijo la madre de la víctima cuando se percató que su hija no había regresado del domicilio de su ex yerno. Muy angustiadas, la señora fdijo a las autoridades que la última persona que estuvo con su hija fue David Martínez Francisco, el cual desde el momento de su desaparición fue imposible de localizar, ya que no contestó nunca su teléfono y borró su cuenta de Facebook.
CADÁVER
“Tenemos que avisar a las autoridades”, dijo un testigo a los demás vecinos, luego de encontrar el cuerpo de una joven, el cual tenía la cabeza desprendida y se encontraba a unos centímetros de distancia del resto del cuerpo. Por lo que, minutos después arribaron policías de la Secretaría de Seguridad (SS) y personal del Servicio Médico Forense al fraccionamiento Héroes San Pablo, localizado en el municipio de Tecámac, quienes identificaron a la víctima como Jael Martínez Prend, desparecida el mero día de la Virgencita.
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