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Juan Hernández
Vaya repasada que les dio el secretario Martí Batres Guadarrama, a quienes afirmaban que el IECM solo tenía presupuesto para operar hasta septiembre, lo curioso es que con dos comentarios les tiró sus “argumentaciones” y “que se verían en la Corte”.
1) Del propio IECM salió la idea de hacer una reforma a la ley y no fue una idea del GCDMX. El IECM se encontró que no podía tocar órganos porque estaban impuestos por la ley, por las reformas que se hicieron hace dos o tres legislaturas.
2) Con la reforma que se hizo, alcanza perfectamente bien para que el IECM le entregue las prerrogativas y cumpla con sus obligaciones.
3) El IECM no hace nada de obra pública y ¿no le alcanzan mil millones de pesos a su burocracia interna? Algo malo está pasando ahí.
Y les dejó en claro que el Gobierno de la ciudad no va a dar ampliaciones presupuestales al Instituto.
Hay que recordar que ya se les había hecho un adelanto y fue el propio IECM que iba a comenzar a realizar auditorías a la pasada presidencia para saber qué fue lo que pasó con esos recursos que faltaban y se
les tuvo que adelantar. Así de simple.
