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FERNANDO ORTIZ
GRUPO CANTÓN
Ciudad de México.- “El Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Gestión Integral del Agua (SEGIAGUA), realizó un recorrido de inspección en el perímetro desde la Calzada de Tlalpan y Circuito Aztecas, para constatar que no hay registro de socavones en las inmediaciones del lugar.
De agosto a la fecha se han registrado tres socavones en vías primarias cercanas al Estadio Ciudad de México, uno en el cruce Av. Miguel Ángel de Quevedo y División del Norte, en la colonia El Rosedal, a 4 kilómetros, que ya fue atendido por personal de la dependencia el pasado lunes. Se retiraron 1.5 metros cúbicos de material para la reparación de la tubería afectada, mientras equipo técnico de Telmex realizó el encofrado de ductos que se encontraban en la misma área.
Posteriormente, se procedió con el relleno y compactación del terreno con 13 metros cúbicos de tepetate y se reabrió la vialidad alrededor de las 17:00 del mismo lunes.
Uno más, que es el más próximo al recinto deportivo, reportado a 400 metros sobre Calzada de Tlalpan y la Entrada B del estadio, se encuentra en el que se llevan a cabo trabajos de evaluación para determinar la afectación a la red de drenaje. Asimismo, se registró uno sobre Calzada de Tlalpan No. 3222, en la colonia Coapa, a un kilómetro de distancia, ocasionado debido a la falla en un pozo de visita y que está en proceso de atención por parte de personal de la SEGIAGUA.
Además, en Av. del Imán casi esquina con Delfín Madrigal, colonia Pedregal de Carrasco, se registró una fuga de agua potable, misma que fue concluida en noviembre con la reparación de la tubería de 12 pulgadas.
Es importante señalar que en la zona alrededor del Estadio Ciudad de México se llevan a cabo diversos trabajos para las obras de captación pluvial y reforzamiento del drenaje, que beneficiarán a 40 mil habitantes de las colonias Santa Úrsula Coapa, Cantil del Pedregal y Caracol. Estas obras corresponden a la construcción de colectores con distancias de 1,171 metros para el norte y 1,397 para el sur, así como tanques de tormenta con capacidades de 5,500 metros cúbicos y 3,478 metros cúbicos, respectivamente”.
La cobertura refleja el hundimiento
La nota publicada sobre los socavones en los alrededores del Estadio Azteca se sustenta en trabajo de campo y quejas de la realidad que viven los vecinos. Además, las inspecciones gubernamentales pueden diferir en tiempo o método de registro. Un socavón puede aparecer y ser atendido de manera inmediata, pero no reflejarse en los reportes oficiales en el momento de la visita de las autoridades. La cobertura periodística se basa en evidencias visibles, testimonios y trabajos de reparación ya realizados, como en el cruce de Av. Miguel Ángel de Quevedo y División del Norte, donde se extrajeron materiales, se repararon tuberías y se compactó el terreno.
La nota también contextualiza la causa de los hundimientos: no son exclusivamente provocados por las obras del estadio, sino por fugas en la red de aguas residuales, reblandecimiento del suelo lacustre, drenaje colapsado y sobreextracción de agua subterránea. Esta explicación refuerza que los socavones son un asunto estructural y de infraestructura, no un efecto directo de las obras deportivas.
Los hundimientos registrados no son aislados ni anecdóticos: se han atendido 164 socavones en la Ciudad de México, un promedio de uno cada tres días. Esto refleja que los problemas de infraestructura hidráulica y drenaje son persistentes, y que la ausencia de reportes oficiales no implica que el fenómeno no ocurra.
Finalmente, la cobertura cumple su función periodística: alertar sobre riesgos para peatones, automovilistas y la movilidad urbana, así como visibilizar la necesidad de reforzar la infraestructura hidráulica. Defender la nota no significa desconocer el trabajo del gobierno; significa reconocer que la experiencia de los vecinos y los registros de atención de socavones son evidencia tangible de un problema que requiere seguimiento y transparencia.
