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El doctor Sergio Alfieri revela que a pesar de prescribirle 60 días de descanso al pontífice en su previa hospitalización, volver a su trabajo era parte de la terapia de recuperación
REDACCIÓN, GRUPO CANTÓN
Ciudad de México.- El doctor Sergio Alfieri jefe del equipo médico que atendió al Papa Francisco I en su hospitalización del mes pasado, reveló algunos detalles del estado de salud del pontífice, así como la decisión de que siguiera desempeñando su trabajo religioso a pesar de prescribirle 60 días de recuperación.
A través de una entrevista con un periódico italiano, el cirujano Sergio Alfieri, indicó que pudo ver al Papa Francisco el pasado sábado después del almuerzo. El médico señaló que durante la Semana Santa el pontífice se encontraba en un muy buen estado de salud e incluso, tras su hospitalización le comentó “Estoy muy bien, he vuelto a trabajar y tengo ganas”.
Sergio Alfieri relató que al visitar al Papa le llevó una tarta de frutos negros y no había señales de enfermedad. Fue hasta la madrugada del lunes que fue llamado para volver a hospitalizar a Francisco I en el Hospital Gemelli de Roma. El médico declaró “no había nada más que hacer”, pues cuando llegó, el Papa estaba con los ojos abiertos y problemas respiratorios porque había entrado en coma y no respondía a los estímulos dolorosos.
El cirujano fue cuestionado sobre si alguna vez le aconsejó al pontífice dejar de trabajar pues en su hospitalización de marzo le prescribió 60 días de convalecencia para poder recuperarse y respondió “No, porque era lo correcto. Él es el papa. Volver al trabajo era parte de la terapia y nunca se expuso al peligro. Es como si al acercarse el final decidiera hacer lo que tuviera que hacer. Como hizo el domingo, cuando aceptó la propuesta de su asistente sanitario personal Massimiliano Strappetti de dar la vuelta a la plaza entre la multitud”.
A finales de marzo el pontífice fue visto en público después de su ingreso al Hospital Gemelli de Roma por 37 días. La causa fue una neumonía, que de acuerdo con su doctor, estuvo a punto de quitarle la vida, pero pudo salir y participar en las ceremonias de Semana Santa.
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